Zona Fría: advierten que el intento de suprimir los descuentos "no está cerrado"
Qué impacto podría tener la supresión de este beneficio si insisten con retrotraerlo.
Por Redacción 0223
PARA 0223
Luego de que la Cámara de Diputados rechazara por escaso margen la eliminación del régimen de zona fría, el dirigente Alejandro Rodríguez advirtió que el intento del Gobierno nacional de suprimir los descuentos en la tarifa de gas no está cerrado y podría volver a discutirse en el corto plazo.
“Hace 48 horas no lograron el objetivo, pero por muy poco. Fue el intento más serio, porque buscaba eliminar el beneficio por ley, que es la única forma legal de hacerlo. Por eso es importante estar alertas”, sostuvo Rodríguez en diálogo con Extra (102.1), al referirse a la iniciativa impulsada por el Ejecutivo.
En términos concretos, explicó que una eventual eliminación del régimen implicaría que los usuarios de Mar del Plata y otras zonas frías de la provincia de Buenos Aires perderían descuentos del 30% o del 50% en sus facturas de gas, según el caso. Los jubilados que cobran la mínima, trabajadores de menores ingresos y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo acceden actualmente al descuento mayor.
Rodríguez advirtió que el impacto sería todavía más grave si se tiene en cuenta el escenario tarifario previsto para 2026. “El Gobierno va a seguir aumentando el precio del gas incluido en la tarifa y va a reducir o eliminar otros subsidios. Si se quita el descuento por zona fría, una factura que hoy tiene el 50% de rebaja pasaría a pagar no menos de un 60 o 70% más”, alertó.
En ese sentido, remarcó que el beneficio no es un privilegio, sino un mecanismo compensatorio. “En las zonas frías se consume alrededor de un 94% más de gas al año que en regiones con temperaturas más altas, y casi la mitad de ese consumo es para calefacción. Es un consumo involuntario, ligado a la salud y a las condiciones climáticas”, explicó.
El dirigente también puso el foco en la realidad social de Mar del Plata, donde existe un alto porcentaje de hogares integrados por jubilados o personas que pasan gran parte del día en sus casas. “No existe una familia tipo. Hay adultos mayores, personas que no están en actividad, hogares con bebés o chicos pequeños, que necesitan calefacción durante más horas. Eso no se tiene en cuenta cuando se analiza el consumo”, señaló.
Además, Rodríguez destacó que, aunque la inflación haya desacelerado, el peso de los gastos fijos sobre los ingresos familiares aumentó de manera significativa. “El gasto fijo —alquiler y servicios— creció de forma exponencial. Se da la paradoja de que baja la inflación, pero cae la capacidad de compra del ingreso de los hogares. Y el gasto fijo es prácticamente imposible de flexibilizar”, afirmó.
Frente a los cuestionamientos sobre una supuesta distribución indiscriminada del beneficio, Rodríguez fue contundente: “En la provincia de Buenos Aires el descuento por zona fría llega a 1.240.000 hogares, pero la provincia tiene más de 6 millones. Es decir, solo el 20% de los hogares recibe el beneficio. Ocho de cada diez pagan el gas a precio pleno. Eso es una política focalizada, no indiscriminada”.
Por último, citó un estudio de la consultora Economía y Energía, que analizó el impacto del régimen desde su implementación en 2021. “En las zonas frías el consumo aumentó apenas un 7% entre 2021 y 2024. Eso demuestra que no hubo derroche, sino un uso racional: un poco más de calefacción para vivir mejor”, sostuvo. En ese marco, Rodríguez planteó que la discusión de fondo no debe darse a través de las tarifas. “La política tarifaria no es una herramienta de redistribución. La redistribución se hace con una política tributaria seria, donde el que más tiene paga más impuestos y se combate la evasión. No se corrigen desigualdades con una factura de gas”, concluyó.
Leé también
Temas
Lo más
leído

