Un enorme árbol está por caer sobre su humilde casa en construcción y denuncia que la Municipalidad no lo retira

La angustiante situación se da sobre una vivienda del asentamiento Santa Rita. "No quiero que me aplaste la casa que estoy haciendo a pulmón hace dos años", suplicó la dueña que vive con sus hijos y nietos.

Un enorme árbol está por caer sobre su humilde casa en construcción y denuncia que la Municipalidad no lo retira

9 de Marzo de 2025 18:16

Por Redacción 0223

PARA 0223

Isabel es una vecina del barrio Santa Rita de Mar del Plata y desde hace varios meses vive con preocupación - sobre todo a partir de las últimas tormentas - por un enorme árbol que está a punto de caer sobre su propia casa, donde vive con sus hijos y nietos. Denuncia que el Gobierno municipal no da respuestas ante la emergencia.

En diálogo con 0223, la mujer de 41 años explicó que hace dos años trabaja para levantar su casa en Hernandarias entre Namuncurá y Brumana, en la esquina del asentamiento precario del barrio. "Llamé a la Municipalidad y me dijeron que vivía en zona roja. Dudo si no me quieren ayudar por eso", apuntó.

"No quiero que me aplaste la casa que estoy haciendo a pulmón hace dos años. Todos los meses voy comprando materiales para la casa. No quiero hacer tanto sacrificio para que el árbol se caiga encima", manifestó.

El árbol inclinado está a punto de caer sobre su casa.

Isabel trabaja para el Organismo Provincial de Integración Social y Urbana (Opisu) que promueve la integración urbana, social y productiva de las villas, asentamientos y complejos habitacionales, pero como muchos tiene un sueldo que apenas le alcanza para vivir. Está a cargo de sus hijos de 23, 19 y 7 años. De los dos mayores fue abuela de un nene de 5 años y otra beba de 1 año.

La vecina de Santa Rita señaló que las raíces del árbol en cuestión están totalmente podridas y confió que ninguno de los números de emergencias del Ente Municipal de Servicios Urbanos (Emsur), Defensa Civil ni ningún otra área de la Municipalidad le dan respuesta. "Si yo tuviera para cortar lo haría, pero realmente vivo mes a mes. La verdad no me alcanza", afirmó.

La mujer confió que hace tres años sucedió un hecho similar con otro árbol en la misma cuadra que cayó sobre una casilla de chapa. "No quiero que pase una desgracia. ¿Se tiene que caer para que se preocupen de verdad? Cada vez que hay una tormenta dormimos con un ojo abierto", reconoció después del temporal del último viernes.

"Dios no quiera que sea una tragedia y nos maten a mi, a mis hijos y mis nietos. Si estamos adentro, nos mata. Lo material va y viene, pero la vida de un ser humano no", concluyó.