Fue leyenda en Werder Bremen, pasó por Schalke 04 y terminó sin un centavo

Una historia de gloria, derroche y redención que marcó a dos gigantes de la Bundesliga.

Una historia de gloria, derroche y redención que marcó a dos gigantes de la Bundesliga.

11 de Mayo de 2025 10:24

Por Redacción 0223

PARA 0223

Llegó a convertirse en millonario gracias al fútbol, pero lo perdió todo. Aílton Gonçalves da Silva, aquel delantero brasileño que hizo historia en la Bundesliga con Werder Bremen y tuvo un breve paso por Schalke 04, es un ejemplo de cómo el éxito puede desvanecerse tan rápido como llegó. Su talento lo llevó a la cima del fútbol alemán, pero la mala administración financiera y los excesos personales lo dejaron en la ruina.

El sueño de todo futbolista profesional es llegar a las grandes ligas de Europa. Para Aílton, ese sueño se hizo realidad en Alemania. Aunque su primera temporada fue discreta con solo dos goles, el Werder Bremen confió en su potencial. No se equivocaron. Con esfuerzo y dedicación, el brasileño se transformó en un verdadero ídolo del club, liderando al equipo en una de sus etapas más exitosas.

En la temporada 2003/04, Aílton explotó: anotó 28 goles en Bundesliga y fue clave en el doblete histórico del Werder Bremen, ganando tanto la liga como la Copa de Alemania. Ese mismo año, fue elegido el mejor jugador de la temporada, convirtiéndose en el primer extranjero en obtener ese galardón. Su historia parecía encaminada al éxito eterno. Pero como suele pasar en el deporte, el camino no siempre es ascendente.

Tras su brillante etapa en Bremen, el delantero fichó por el Schalke 04, donde jugó solo una temporada antes de partir a Turquía, al Besiktas. Allí comenzaron los problemas. Su rendimiento bajó, y con él, su confianza. Sin la estabilidad deportiva, su vida personal también se desmoronó. Aílton gastaba sin control —se estima que llegó a desembolsar más de 100.000 euros al mes solo en ropa—, y sus malas decisiones lo dejaron sin nada.

Regresó a Brasil, a su natal Rio Branco, enfrentando una realidad muy distinta a la que vivió en Alemania. Sin fortuna ni oportunidades, su historia parecía destinada al olvido. Pero el Werder Bremen no se olvidó de su ídolo. En un acto de agradecimiento, el club le organizó un partido homenaje que no solo reunió a miles de fanáticos, sino que también recaudó fondos para ayudarlo a salir adelante.

Gracias al apoyo de los hinchas y del club que lo vio brillar, Aílton logró recomenzar. Su historia es un ejemplo poderoso de redención, pero también una advertencia sobre los peligros de la fama sin control. Werder Bremen y Schalke 04 siguen siendo parte de su legado, uno que mezcla goles, gloria, caída y, finalmente, una segunda oportunidad.