Alvarado se juega gran parte de su futuro ante un viejo conocido

Se juega en un día y horario especial, debido a las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, pero especial también es el partido para Alvarado por varias cosas. Primero y principal, porque tiene la posibilidad de salir de la zona del descenso y pasarle la presión a sus rivales, y porque en el banco de enfrente estará Alexis Matteo, el técnico que arrancó esta temporada y fue inexplicablemente despedido con apenas 5 encuentros dirigidos. A las 15, se ven las caras en el Minella con un "torito" contra las cuerdas y necesitado. 

La derrota de Güemes frente a Atlanta se celebró pero de nada servirá si los marplatenses vuelven a dejar puntos en casa. El último empate con Tristán Suárez costó caro, mucho más tras la goleada sufrida en Salta. Por eso, ante la paridad en el fondo, el equipo de Marcelo Vázquez sabe que gran parte de su ilusión de salvarse estará puesta en los tres partidos que le quedan de local. Si logra los 9, tendrá gran parte de ese objetivo logrado. 

En una semana que se confirmaron lesiones de dos titulares, Vázquez deberá salir con una propuesta más ofensiva porque no sirve otra cosa que ganar. Hoy, además de su habitual solidez (dejando de lado lo que le pasó con Gimnasia y Tiro), le deberá agregar peso en ataque. El lugar de Kevin Silva seguiría siendo de Tomás Fernández, aunque podría pasar a Blasi como zaguero derecho, Irazoque de "6" y poner un lateral izquierdo natural (Gorgerino o Aleo). Ante la ausencia de Enzo Martínez, que sufrió un desgarro, el ingreso como titular de Joaquín Susvielles gana terreno para ser referencia y el apoyo en una delantera que le cuesta cuidar la pelota. 

Enfrente estará el Deportivo Maipú de "Piki" Matteo, que tiene sed de revancha no contra el club del que es hincha, pero sí contra la gente que lo despidió sin motivos con apenas cinco fechas de torneo. Hoy vuelve al Minella con el local urgido y su equipo buscando dar un paso más hacia el Reducido.