Masacre en El Martillo: con matices, las defensas coincidieron en pedir la absolución de todos los imputados

De manera subsidiaria solicitaron el cambio de calificación a homicidio en riña. Duros cuestionamientos a la fiscal que inició la investigación y al accionar policial.

Los cinco imputados escuchando los alegatos. (Foto: 0223).

9 de Diciembre de 2019 15:37

Por Redacción 0223

PARA 0223

Más allá de algunas diferencias en su planteo y en la estructura de sus alegatos, los cuatro defensores de los cinco imputados de incendiar la casa, matar a Nelson Alderete y volver a quemar su cuerpo solicitaron este lunes la absolución y, de manera subsidiaria, un cambio de calificación al planteado por la fiscalía en su pedido de prisión perpetua. Los miembros del Tribunal Oral en lo Criminal 3 darán a conocer el veredicto y sentencia el viernes 20 de diciembre en horas de la tarde.

Con un pequeño cuarto intermedio –que se demoró más de lo previsto por la rotura del ascensor que trasladaba a dos de los imputados- los alegatos de la defensa oficial y los defensores particulares se realizaron por espacio de dos horas y media. Sin réplicas finales y solamente con unas breves últimas palabras de María Belén Palavecino, se cerró el debate que juzga lo ocurrido entre el 7 y el 8 de mayo de 2017 en el barrio El Martillo.

Grupo indeterminado de personas

Tras el pedido del fiscal Fernando Berlingeri de que los cinco acusados sean condenados a la pena de prisión perpetua, el primer alegato defensista estuvo a cargo del defensor oficial Mauro Giacomaso en representación de Ángel Adrián Chávez y Alexis Rodrigo Juárez.

A lo largo de media hora, Giacomaso sostuvo que no estuvo probada la coautoría porque el grupo indeterminado de personas planteado en la acusación no permite establecer el rol de cada uno de los supuestos integrantes no las tareas que llevaban adelante.

“¿Cuál fue el aporte de mis defendidos que no tenían motivo alguno para participar?” fue la pregunta que el defensor hizo en voz alta al recordar que la historia de venganzas cruzadas que comenzó en 2010 los ubicada afuera del conflicto. En el mismo sentido planteó que la presencia de Chávez y Juárez en el barrio las horas previas no es motivo suficiente para demostrar que “fueron parte esencial y que tenían las riendas del hecho”.

Según el defensor oficial en el debate se escucharon indicios no probados y conjeturas de carácter endeble que no permiten acreditar con certeza y prueba de que participaron del ataque a la vivienda donde se atrincheró Alderete, por lo que solicitó la absolución de ambos al no estar acreditada la coautoría funcional.

De manera subsidiaria y en caso de dar acreditado lo que definió como testimonios parciales, planteó que el hecho se dio en un homicidio en riña o agresión ya que existieron agresiones recíprocas. Al considerar que ambos no registran antecedentes penales, pidió que se si los condena por el incendio de la vivienda –con los mismos reparos para definir la responsabilidad- la pena no sea mayor a los tres años de prisión.

A su turno el abogado Hernán Mosquera planteó ante los jueces Fabián Riquert, Juan Manuel Sueyro y Silvina Darmandrail que Mariano Iván Lescano no participó del plan previo sostenido por el Ministerio Público Fiscal y que cuando terminó las tareas por el ataque a balazos que sufrió cerca de las seis tardes en el que mataron a Francisco Chávez (15), regresó a su casa.

Mosquera calificó de parcial la exposición que hicieron varios de los testigos que participaron del debate y solicitó la absolución de su defendido. En sintonía con la defensa oficial, solicitó de manera subsidiaria que se califique lo sucedido como homicidio en riña.

“Falcato está preso hace dos años y ahora aparece otra posible autoría”

La mencionada falla en uno de los ascensores durante el cuarto intermedio hizo que la actividad se retomar a las doce y media del mediodía con la modificación en el orden de los últimos alegatos. El primero en hacer fue Wenceslao Méndez que además de solicitar la absolución de Javier Alberto Falcato cuestionó duramente el accionar de varios operadores judiciales en las instancias previas al juicio y el de la policía que se abstuvo de intervenir –salvo excepciones- cuando comenzaron los incidentes.

Tras felicitar a la defensa oficial por las consideraciones planteadas en su alegato sobre la coautoría funcional y sobre la calificación de homicidio en riña, planteó que la situación de su defendido era diferente a la del resto. En tal sentido se refirió al caudal probatorio y cuestionó la calidad de la declaración de la única persona que lo ubica en el lugar y –especialmente- a los pasos previos para llegar al debate.

“Acá no está la fiscal que llevó adelante la instrucción (María Isabel Sánchez) ni la Justicia de Garantías, por lo que son ustedes los que tienen que poner la cara por eso”, le dijo a los miembros del Tribunal Oral en lo Criminal 3. “No me voy a olvidar de lo que pasó antes, porque ante un homicidio el fiscal tiene que estar en el lugar: acá hubo tres homicidios y la fiscal no estuvo”, agregó.

En la misma línea argumental cuestionó la declaración del efectivo policial Emanuel Lobo que declaró en el debata y sobre el que sostuvo “debería irse con un pedido de procesamiento”. “Dijo que conocía a todos y el día que tenía que actuar, no actuó y facilitó que se perpetraran esos hechos”, agregó.

Méndez volvió a pedir la absolución de su defendido por considerar que no estuvo en el lugar durante la muerte de Alderete porque llevó a su hijo al Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) y se quedó en el primer piso mientras lo operaban y hasta su fallecimiento a la una y cuarenta de la madrugada. “¿Pudo haber vuelto al barrio? Sí, pero cuando lo hizo no quedaba nada”, se preguntó y respondió Méndez.

La actividad en el sexto piso de Tribunales se cerró con el alegato de Cristian Moix que planteó la absolución de María Belén Palavecino y dos cuestiones subsidiarias: el cambio de calificación a homicidio en riña –como Giacomaso y Mosquera- y supletoriamente que se entienda que hubo un estado de emoción violenta en contexto de psicología de masas.

Para el abogado el pedido de prisión perpetua para los cinco imputados es solucionar un problema relaciona con la falta de la presencia del Estado con 175 años de prisión. Moix dijo que no hubo presencia del Estado esa noche, al igual que no la hubo durante tanto tiempo antes en la historia de esas familias.

“El único plan que había era matar a Belén Palavecino, el resto fue un movimiento anárquico porque no existían dos grupos sino personas que se conocían entre ellas y otras que no. “El que mató a Alderete no está acá”, concluyó.

Palavecino fue la única de los cinco acusados que decidió decir unas pocas palabras tras la clausura del debate y pidió que se haga Justicia y que consideraran que tenía dos hijos. Tras acordar un plazo mayor al previsto para dar a conocer el veredicto y la sentencia, el Tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta el viernes 20 de diciembre.