11 meses de ocupación, 120 días sin cobrar sueldos y 12 familias con futuro incierto

El descalabro en el que cayó la empresa Boston mantiene a los trabajadores de su sucursal de calle Buenos Aires en vilo ante la posible concreción de un desalojo.

Los trabajadores atienden de 9 a 20 y se quedan a dormir en el lugar.

29 de Marzo de 2019 20:36

Por Redacción 0223

PARA 0223

Los problemas en la empresa Boston empezaron en el invierno del 2017, con la falta de pago de los salarios, en aquel entonces, correspondientes al mes de agosto. Al menos de modo público, esa fue la fecha en la que se inició el descalabro económico de la célebre cadena de confiterías, famosa en toda la Argentina por su producción de medialunas, producto con el que supo ganar de a millones de pesos.

Al verano siguiente, durante el período estival del 2018, las versiones de cierre de la firma se volvieron cada vez más potentes. Sin embargo, con la llegada del otoño, hace exactamente un año, los nuevos dueños de la compañía aseguraron en reiteradas oportunidades que no existía riesgo alguno para los trabajadores.

El derrotero hasta la actualidad incluyó protestas, paros, intervenciones del gremio de los pasteleros y conciliaciones obligatorias del Ministerio de Trabajo. Hubo numerosos despidos y tuvo lugar el cierre de la emblemática sucursal de la costanera marplatense, con su posterior desalojo. Sin embargo, hay un grupo que aún resiste: el del local de calle Buenos Aires.

 

 

Una reunión entre los abogados de la empresa y el Sindicato de Pasteleros iba a tener lugar este viernes. Según confirmó Lucía, una de las trabajadoras afectadas de esa sucursal céntrica, “el encuentro quedó postergado”.

Con la esperanza de que la semana próxima tenga finalmente concreción, la mujer dialogó con 0223 sobre el preocupante panorama que atraviesan los doce trabajadores que permanecen día y noche en el lugar.

“Estamos ya hace 11 meses ocupando la confitería, son 120 días sin cobrar sueldos, no tuvimos medio aguinaldo y menos aún vacaciones. Y lo importante es resaltar que somos 12 trabajadores pero que en realidad hay 12 familias detrás que no saben qué será de su vida en poco tiempo”, detalló la vocera.

 

 

De acuerdo a las pocas especificaciones recibidas, según contó Lucía, “en mayo en algún momento se concretaría el desalojo del local”, lo que enciende las alarmas para el porvenir.

“Mal que bien estamos con las medialunas y con eso podemos llevarnos algo de dinero para nuestras casas. Pero la venta está muy floja en general, la gente no tiene plata, se ajustó. Y eso también nos complica” describió Lucía.

Sin aportes jubilatorios ni pagos a la obra social por parte de la empresa, la situación en la confitería Boston continúa convirtiéndose en un martirio diario para 12 familias que ven la llegada del invierno con muchísima preocupación.