Paso a paso: así será la demolición de Torres y Liva

0223 revela el detalle de las siete semanas de trabajo que demandará el proceso para derribar la parte de la estructura que quedó en pie de la distribuidora.

29 de Enero de 2020 11:49

Por Redacción 0223

PARA 0223

Cada vez falta menos para que el Municipio dé el puntapié inicial al largo proceso para demoler la parte de la estructura que quedó en pie de Torres y Liva, la distribuidora que fue blanco de un incendio histórico durante la noche del 15 de diciembre de 2019, y devolverle un escenario de normalidad a la zona de Rivadavia y 20 de septiembre que todavía se ve afectada por las secuelas del impactante siniestro.

El Municipio, a través del cuerpo de Defensa Civil y el trabajo mancomunado con otros organismos como el Cuartel central de Bomberos y Grupo Mitre S.A, la empresa a la que se le adjudicó la licitación de más de 11 millones de pesos por la demolición, ya tiene todo diagramado y planificado para las próximas siete semanas que demandarán estos trabajos.

0223 revela el detalle de la planificación que previeron las autoridades para cumplimentar con el complejo proceso que busca poner fin a los trastornos y dolores de cabeza que envuelven desde fines del año pasado a comerciantes y propietarios de viviendas aledañas al comercio de Carlos Torres.

Semana 1

Los primeros siete días de trabajo estarán abocados a instalar todos los elementos de seguridad tendientes a prevenir cualquier eventualidad no deseada durante el avance de las acciones de la firma para derribar de manera controlada la estructura.

En esta etapa, se instalarán un cerco perimetrale sobre Rivadavia hacia 20 de Septiembre y otro sobre 20 de septiembre. También se producirá el desembarco de una excavadora de 20 toneladas y la descarga de diferentes contenedores móviles donde se volcarán escombros y otros materiales.

Semana 2

A partir del día ocho está previsto el comienzo la demolición propiamente dicha, con retroexcavadoras de 20 y 34 toneladas. Para organizar el proceso, las autoridades resolvieron dividir el edifico de Torres y Liva en cinco sectores distintos.

Durante el primer día de la segunda semana se comenzará a derribar la zona superior del sector cinco (ver foto de portada) hasta el nivel de vigas sobre la planta baja, mientras que en las cuarenta y ocho horas siguientes se hará lo propio pero con el sector cuatro hasta el primer piso.

En los últimos cuatro días, la demolición pondrá el foco sobre la zona superior de los sectores uno y dos hasta el nivel de vigas sobre el primer piso. La novedad es que para esta instancia ya se contará con un robot especializado que agilizará este tipo de labores.

Semana 3:

Para este período, se sumará junto al robo especializado una grúa para poder dar inicio al trabajo para derribar el tanque de agua que pertenecía a la distribuidora con décadas de trayectoria en Mar del Plata.

De no surgir imprevistos, las autoridades involucradas en el operativo confían en finalizar la demolición del tanque y de la zona de la sala de máquina en seis días.

Semana 4:

En esta semana, el protagonismo de las tareas lo vuelven a tener las retroexcavadoras de 20 y 34 toneladas, que atacarán el sector tres del edificio hasta lograr la nivelación con el resto de los sectores.

Para el día 27 de trabajo, ya se espera haber concluido con la demolición de la zona inferior de todos los sectores en los que fue dividido la estructura que queda en pie de Torres y Liva.

Semana 5: 

Con la demolición finalizada, lo que deberán hacer en esta semana las retroexcavadoras de 20 y 34 toneladas es proceder con el retiro de los distintos escombros acumulados en una primera instancia y con el desarme de las protecciones que se colocaron en la zona a modo de prevención.

Semana 6:

Durante este lapso, las retroexcavadoras seguirán por 48 horas con el retiro de escombros y el desarme de protecciones y luego se comenzarán a colocar los cercos perimetrales sobre la línea municipal que delimita el edificio.

El cerco en cuestión tendrá 2,70 metros de altura, será de tipo metálico y estará formado por chapas trapezoidales colocadas en horizontal, encastradas en soportes metálicos que estarán ubicados cada 3 metros en color verde.

Sobre el cerco, se montará un manto de media-sombra de un metro de alto que contendrá gran parte del polvillo que pueda producirse en el lugar y pequeños escombros, según se detalló en la información oficial a la que tuvo acceso este medio.

En la línea municipal, donde no haya entradas a propiedades, el Municipio levantará un trazado continuo de placas fenólicas de 2,4 metros de altura. Con esta segunda barrera, se busca evitar el paso de escombros menores que puedan dañar las fachadas linderas.

Semana 7:

En los últimos tres días de trabajo, a las autoridades sólo les resta culminar con otros detalles de la instalación del cerco perimetral de seguridad para luego avanzar con la limpieza final de la obra y el desmonte de la maquinaria utilizada durante la demolición.