Martínez Bordaisco: "Me gustaría que la UCR siga con la presidencia del Concejo"

Mano a mano a 0223, el senador provincial electo de Juntos abogó para que la titularidad del cuerpo que tiene a su cargo hasta diciembre siga en manos de un dirigente del partido centenario. "El radicalismo es un partido con vocación de poder", ratificó.

"El radicalismo tiene otro peso a la hora de construir consensos", confió. Foto: 0223.

15 de Noviembre de 2021 10:41

Por Redacción 0223

PARA 0223

Ariel Martínez Bordaisco logró el objetivo que se había propuesto para estas elecciones y continuará su carrera política en la Legislatura bonaerense como senador, lugar desde donde promete luchar por la coparticipación y los "recursos históricos" que Mar del Plata reclama hace décadas a cada gestión de la Provincia. 

A horas de haber digerido los más de 46% de votos que cosechó "Juntos", el legislador electo celebra la contundente victoria que ratificó la coalición en la ciudad y entiende que el "masivo" acompañamiento en las urnas también es un respaldo a "otra forma de hacer política". "Estoy convencido de que hubo un rechazo a la gestión nacional y provincial", apunta la mano derecha del radical Maximiliano Abad.

Pero más allá de los análisis poselectorales, el hombre que hasta diciembre permanecerá al frente de la presidencia del Concejo Deliberante, no pierde de vista los desafíos de futuro que tendrá el cuerpo y manifiesta su deseo de que una figura del partido centenario sea la que lo suceda en el cargo. "Soy radical, y voy a decir que tiene que ser un radical", insiste, mano a mano con 0223.

-¿Qué análisis hace de esta última victoria que vuelve a dejar un piso electoral muy alto para Juntos en una elección?

-Más allá del clima electoral que se vive en el búnker de Juntos por la gran elección que se ha hecho, hay que saber que estamos en un contexto de pandemia, de muchas dificultades económicas, donde los bonaerenses no la están pasando bien y creo que las fuerzas políticas debemos reflexionar esta situación y analizarlo en el postelectoral. Pero más allá de eso, sí estoy convencido de que hubo un acompañamiento masivo de los bonaerenses, especialmente de los marplatenses y banenses de la quinta sección electoral, a Juntos, una coalición que está planteando una forma de hacer política, respetando los valores, la diversidad de todos los partidos que integran la coalición, y es una apuesta a los liderazgos que vienen. Por eso en nuestra ciudad se ratificó un camino.

-¿Y siente que esta angustia a la crisis de la pandemia también se manifestó en una sensación de hartazgo social hacia determinadas políticas?

-Estoy convencido de que hubo un rechazo a la gestión nacional y provincial porque además, el mensaje de las Paso, no fue correctamente interpretado por la fuerza oficialista, que lo puso en un código que no terminó de ser entendido por la Provincia y creo que eso la fue la clave para que la oposición obtuviera otra vez un triunfo. Y esto nos llama a la mesura y la responsabilidad, porque este triunfo es una responsabilidad que nos dieron los bonaerenses a través de las urnas.

-¿Cómo ve la nueva conformación que tendrá el Concejo Deliberante a partir de las elecciones?

En el Concejo que me ha tocado presidir, nunca hubo mayorías absolutas y eso es sano para la democracia porque busca el consenso y el disenso entre las mayorías y las minorías para tratar de las ordenanzas que necesita el Ejecutivo municipal y Mar del Plata y Batán. Entonces, en el contexto que viene, hay una gran cantidad de concejales que entran de la coalición de Juntos pero que no tienen mayoría absoluta, por lo que van a requerir de la misma gimnasia legislativa. Y no hay que tenerle miedo a la mirada distinta o a la discusión, porque quizás de ese debate sale una mejor ordenanza. Avizoro un Concejo de mucho debate, consenso y con gran responsabilidad porque son dos años de pospandemia en los que se deberán discutir herramientas legislativas para reconstruir el tejido social y económico de la ciudad.

-¿Y quién le gustaría que se ocupe en los próximos años de la presidencia del Concejo?

Si yo dijera quien quisiera que ocupe con la presidencia, sería injusto con un montón de concejales que se han desempeñado conmigo en esta composición y que van a seguir así como los nuevos que ingresan, que son grandes dirigencias políticos. Pero sí estoy convencido que tiene que ser alguien de la fuerza política de Juntos porque así lo marca la costumbre sana del Concejo Deliberante.

-Y de la UCR….

-Sí, me gustaría que pueda ser de mi partido. Yo soy radical, y voy a decir que tiene que ser un radical porque en estos consensos necesarios de construir en un deliberativo el radicalismo tiene un peso especial en eso.

-Y  más allá de representar naturalmente a Mar del Plata, ¿cuál es el eje de trabajo que va a tratar de llevar a la Legislatura?

Hay muchos debates que hay que dar, y todas esas discusiones están vinculadas con el ámbito productivo. Pero me parece que el debate que siempre viene quedando afuera y que va a ser central, por los legisladores que suma Mar del Plata, es la discusión por la ley de Coparticipación y de los recursos económicos que le corresponden a nuestra ciudad. Y hay que discutir la autonomía municipal: no puede ser que las decisiones se tomen a 400 kilómetros. Los intendentes tienen que tener mayores atribuciones. Esta discusión se puso en evidencia en la pandemia cuando los intendentes tomaban decisiones que se contraponían con las de la Provincia. Creo que ahí están las discusiones del futuro en la Legislatura provincial y no tengo dudas que los legisladores marplatenses van a tener un gran protagonismo en ese sentido.

-Más allá de la consolidación de Juntos, ¿siente que en esta elección el radicalismo también se pudo afianzar como una fuerza con proyección presidencial de cara al 2023?

-El radicalismo se fortaleció dentro de la coalición y eso a su vez fortaleció a la coalición. Mientras los partidos políticos son más fuertes, la coalición es mejor. Lo que se ha puesto en relieve en este proceso político que pasó, con las candidaturas de Facundo Manes y Diego Santilli, es que cuando las coaliciones tienen herramientas serias y equilibradas institucionalmente para resolver sus diferencias, no hay ningún problema porque es la gente la que elige en las urnas y no cuatro o cinco dirigentes sentados en una mesa. Y el radicalismo es un partido con vocación de poder y por supuesto que siempre va a querer espacios de protagonismo, así como el resto de los partidos de la coalición. Lo importante es que los partidos se fortalezcan y que la coalición se mantiene unida de manera estratégica, logrando una alternancia democrática en Argentina después de que el peronismo gobernara 28 años ininterrumpidamente. Eso es muy importante. Y el radicalismo abona esta coalición, y mientras más fuerte sea el radicalismo, más fuerte será Juntos.