"Coco" mejora lentamente y ya tiene hogar sustituto

El mono carayá de cinco años, rescatado de un armario sin luz, agua, ni ventilación en una casona de Belgrano se recupera lentamente y cuenta con un hogar sustituto y una cuidadora permanente.

El animal será evaluado el lunes por especialistas del Bioparque Temaikén

12 de Diciembre de 2021 18:10

Por Redacción 0223

PARA 0223

Coco ya no vive dentro de un armario, aturdido por la música a todo volumen y deshidratado. Si bien no podrá volver a su hábitat natural por las consecuencias de sus años de encierro, comenzó un proceso de rehabilitación para ser lo más independiente posible y cuenta con un hogar sustituto y una persona que se ocupa de él las 24 horas del día.

Desde la ONG Pájaros Caídos, emitieron un nuevo video con el avance de la recuperación del mono carayá de cinco años que producto de las condiciones habitacionales a las que fue sometido durante su primer infancia tiene las articulaciones atrofiadas y presenta un cuadro de desnutrición grave, ya que pesa un tercio de lo que debería pesar un animal de sus características.

 

"Lo recibimos arrastrándose, casi sin poder moverse y hecho un bollito. Lo primero que hicimos fue darle un ambiente calmo y empezamos de a poquito a darle la comida que le corresponde a su especie", narró Clara Correa, presidenta de la organización.

Las cuidadoras tuvieron una conexión inmediata con Coco "Se acercaba mucho a mí y creo que se siente muy a gusto conmigo. Yo trato de transmitirle paz y tranquilidad", contó en diálogo con Télam la voluntaria Silke, 

"Nunca me imaginé que iba a tener un mono en mi casa, pero se dio así y me siento honrada de poder ayudarlo", agregó la rescatista, quien desde chica mostró un amor y respeto innato por los animales "Lo que han hecho con Coco, es crueldad pura".

De a poco, Coco va tomando confianza con el entorno que lo rodea, aunque según explican sus cuidadoras, permanece en cuarentena y aún se asusta con ciertos sonidos como el canto de los pájaros. El primate comparte las instalaciones de su nuevo hogar con dos perros, dos conejos, dos gallinas, una lorita barranquera y una paloma.

"Lo noto en su mirada, que es impactante. Los primeros días tenía los ojos desorbitados, ahora veo una mirada más pacífica, tranquila y sin miedo", contó Silke tras resaltar que "el día que llegó yo lloraba porque pensé que no tenía chances, pero en estos días está mejorando y pienso que puede haber un milagro con él", señaló la voluntaria y adelantó que el lunes Coco tendrá una interconsulta con veterinarios del Bioparque Temaikén para evaluar las multiplicidad de afectaciones físicas y psicológicas, y analizar la viabilidad de su trasladado a un centro de rehabilitación para animales con discapacidad, en la Fundación ONG Carayá, en la provincia de Córdoba.

Coco fue hallado sin dientes y con el cuerpo mayoritariamente atrofiado por una mala alimentación, pesando casi seis kilos menos de lo que debería pesar. Además, a pesar de ser un mono aullador, Coco no tiene la hiperactividad característica de su especie y no hace más que ruidos roncos, por lo que cabe la posibilidad de que "tenga incluso las cuerdas vocales cortadas".