"Tengo todo el día para matarte", le dijo mientras la golpeaba: lo condenaron a 4 años y 9 meses

La pena fue impuesta tras un juicio en el Tribunal Oral en lo Criminal 1. Carlos Alberto Paredes no podrá estar a menos de doscientos metros de la víctima.

El juicio se hizo en el TOC 1. (Foto: archivo 0223).

13 de Mayo de 2021 08:01

Por Redacción 0223

PARA 0223

Un hombre de 61 años que en diciembre de 2017 golpeó en reiteradas oportunidades a la pareja y la amenazó de muerte cuando regresó a su casa en el bosque Peralta Ramos hasta que fue auxiliada por los vecinos fue condenado a 4 años y 9 meses de prisión en el Tribunal Oral en lo Criminal 1. La detención no se hará efectiva hasta que quede firme porque no fue solicitada por el Ministerio Público Fiscal.

El Juez Facundo Gómez Urso condenó a Carlos Alberto Paredes como autor penalmente responsable del delito de lesiones leves agravadas por el vínculo y por haber sido cometidas por un hombre contra una mujer mediando violencia de género, lesiones graves agravadas por el vínculo y por haber sido cometidas por un hombre contra una mujer mediando violencia de género y amenazas simples en concurso ideal.

Los hechos y la autoría

Tras cuatro audiencias de debate en la sala del séptimo piso de Tribunales, el magistrado dio por probado que la madrugada del 18 de diciembre de 2017 Paredes increpó a Ivana Kokotailo cuando regresó a la casa que compartían en el bosque Peralta Ramos le sacó el celular, la tomó del brazo y la arrastró hasta el primer piso de la casa.

“Puta de mierda, ¿de dónde venís?, ¿con quién te encamaste?, ¿de dónde venís hija de mil puta?,me las vas a pagar… dame la clave del celular hija de mil puta, hoy te limpio, hoy no la contás, gritá lo que quieras, hoy nadie va a escucharte, tengo todo el día para matarte a palos, te voy a limpiar", fueron los insultos que decía mientas la arrastraba de los pelos.

Luego de dos intentos fallidos para escapar la víctima le dijo a Paredes que la matara porque no daba más y en ese momento unos vecinos se acercaron al lugar, la mujer logró escapar y se refugió en una vivienda próxima.

Como consecuencia de la sostenida golpiza, Kokotailo presentó traumatismo de cráneo, tumefacción en región frontal, hematoma en dígito presión brazo derecho y glúteo izquierdo, una hipoacusia mixta, neuro-sensorial y conductiva, en oído derecho, con debilitación permanente del sentido de la audición.

Para Gómez Urso la acreditación del hecho y la autoría de Paredes quedó probada a partir de la declaración de Kokotailo a la que calificó de precisa, coherente tanto en lo interno como en lo externo y sostenida en el tiempo. “La solidez de su exposición no se debió solo a su capacidad descriptiva, sino, sobre todo, por las claras y lógicas respuestas brindadas al tenaz defensor, quien, en el buen sentido, la sometió a un interrogatorio persistente y, muchas veces, obstinado”, señaló.

Para el magistrado más allá de la extensa declaración que dio en el juicio, a pocos metros de la ubicación de su agresor, la víctima “ofreció una crónica pormenorizada y, al mismo tiempo, cargada de emotividad, llanto y dolor. Dolor que se advirtió durante todas las jornadas del debate, en las que se mantuvo cabizbaja, aunque notoriamente afligida”.

Falta de respuestas

En la sentencia a la que tuvo acceso 0223 el magistrado sostuvo que a la primera victimización le siguió una segunda en la comisaría, donde no quisieron atenderla y la trataron con desprecio, y una tercera –en Cuerpo Médico-  donde la hicieron esperar y tuvo que pedir por favor que la atendieran porque estaba muy golpeada.

La mujer recordó que el médico le pidió que se levantara la camisa y se bajara los pantalones y que mientras la miraba tomaba café, comía un tostado y anotaba, pero no le sacó ninguna foto y no le mando a hacer ningún estudio. “Fue una situación muy desagradable”, dijo.

“La fortaleza que mostró Kokotailo el día del brutal ataque la exhibió nuevamente en el debate, ya que fue repreguntada por el defensor respecto de todos y cada uno de los puntos sobre los que había declarado y siempre contestó con detalles, con coherencia y con respeto”, destacó el Juez.

Condena y medidas de protección

Tras descartar los pedidos de nulidad que hizo la defensa de Peralta, no hacer lugar a la suspensión del juicio a prueba requerida a favor de Carlos Alberto Paredes ni a la ejecución condicional de toda pena superior a los tres años de prisión, el magistrado lo halló autor penalmente responsable de los delitos de lesiones leves agravadas por el vínculo y por haber sido cometidas por un hombre contra una mujer mediando violencia de género, lesiones graves agravadas por el vínculo y por haber sido cometidas por un hombre contra una mujer mediando violencia de género y amenazas simples en concurso ideal.

La pena impuesta fue de cuatro años y nueve meses de prisión –tal lo solicitado por la fiscal Graciela Trill- y apenas tres meses menos de lo solicitados por los representantes del particular damnificado Marcelo Peralta y David Sorribas Loubet.

El magistrado hizo lugar a las medidas de protección requeridas por la fiscal y dispuso la prohibición absoluta de acercamiento de Carlos Alberto Paredes a menos de 200 metros del domicilio de Ivana Kokotailo o en cualquier otro lugar, siempre que ello fuera ostensible y conocido por el imputado, del mismo modo que respecto de los integrantes de la familia de la víctima.

En el mismo sentido le prohibió al imputado salir del territorio nacional sin previa autorización y hasta que la presente sentencia adquiera firmeza, por lo que deberá notificarse a la Dirección Nacional de Migraciones.