Un portaviones de guerra de EEUU frente a Playa Grande, el gran atractivo del verano del ‘54

La embarcación norteamericana estuvo apenas tres días, en los que no se habló de otra cosa. Su tripulación recibió todo tipo de agasajos y reconocimientos y abordo del navío se llegó a disputar un partido de básquet entre marinos estadounidenses y deportistas de Gimnasia y Esgrima.

14 de Septiembre de 2021 12:31

A primera hora del miércoles 27 de enero de 1954, el portaviones de la marina de guerra norteamericana “Franklin D. Roosevelt” fondeó a unos 5 mil metros de la costa, frente a Playa Grande. Desde entonces y durante tres días, en Mar del Plata no se habló de otra cosa. Al mando del capitán Smith Thach, la nave arribó a Mar del Plata en el marco de “un viaje de confraternidad por los puertos de las naciones americanas”. 

La llegada del portaviones generó enormes expectativas entre marplatenses y turistas que veraneaban en la zona, quienes durante 72 horas ininterrumpidas se mantuvieron atentos a los movimientos de los marinos estadounidenses. "La poderosa y gigantesca nave fondeó poco antes de las 8 frente a Playa Grande, a cinco mil metros aproximadamente hacia el noroeste del morro de la escollera sur, perfectamente visible desde la costa en donde desde temprano -y principalmente en los extremos de las escolleras- se había congregado extraordinaria cantidad de público", recuerdan las crónicas periodísticas de la época. Las dimensiones de la embarcación, cuya dotación normal era de 3600 personas -entre oficiales y tripulantes-, permitían que se la pudiera observar con claridad desde el paseo costero. 

El “Franklin D. Roosevelt” había sido botado en 1945 y fue el segundo de la clase “Midway” que incorporó la flota norteamericana. Contaba con dos cocinas en las que se preparaban aproximadamente 8200 kilos de comida diarios, una clínica dental, cuatro salas de operaciones y rayos X. También, un hospital con dos salas, una sección para curaciones, farmacia, sala de intervenciones quirúrgicas y equipo de fisioterapia; todo equipado con instrumental moderno y atendido por médicos experimentados. 

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