El cierre de La Florida, en el epicentro de una nueva sesión del Concejo Deliberante

El pedido de un grupo de vecinos de barrio La Florida para el cierre parcial de los accesos para evitar episodios delictivos estará en el centro del temario que este jueves abordará el Concejo Deliberante en una nueva sesión ordinaria.

Citados por su presidente Marina Sánchez Herrero para sesionar desde las 10, los concejales tratarán un pedido al Ejecutivo para requerir la realización de un estudio técnico donde se analice en detalle la posibilidad de restricción del acceso al barrio, el impacto que generaría la medida, cómo se llevaría adelante y si es una herramienta que generaría resultados positivos en la lucha por controlar los hechos delictivos.

Dicha solitud ya fue avalada en las tres comisiones -Seguridad, Obras y Legislación- en las que fue tratada, por lo que será finalmente aprobada. Las miradas, así entonces, pasarán a la Secretaría de Seguridad de Horacio García, quien tendrá a su cargo la realización del estudio técnico.

La idea del cierre de todos los accesos al barrio La Florida, a excepción de dos, fue plantada por un grupo de 300 vecinos como una alternativa a considerar para poder controlar los hechos delictivos que se dan en la zona. En octubre de 2020 presentaron una nota al Concejo Deliberante y en 2021 la Comisión de Seguridad se reunió con habitantes del barrio en la Asociación de Fomento La Florida.

Allí también se escucharon otras voces que plantearon dudas sobre la efectividad de la medida, como así también que podría generar otros inconvenientes indeseados, como dificultades por emergencias ante incendios o por problemas de salud de vecinos. Por ello, finalmente la propia Comisión de Seguridad resolvió impulsar el requerimiento de un estudio técnico, aunque no hablando de "cierre" sino de "restricción del acceso". Ese insumo será crucial para evaluar la posibilidad de trabajar en una ordenanza que disponga medidas de restricción a la circulación como herramienta para enfrentar los delitos en aumento en el barrio.

El proyecto que impulsan los residentes de la zona -se calcula que en las 54 manzanas que contempla el barrio viven más de mil familias- prevé la colocación de un alambre perimetral con dos únicos ingresos: uno por calle Bautista F. Mendioroz y el otro, por Newbery. La elección de esos dos puntos tiene que ver con que el barrio, atravesado por el Arroyo La Tapera, se divide en dos partes y de esa manera se crearían accesos independientes.