Sí, viene Jorge: después de 38 años, el tortugo abandona Mendoza y se muda a Mar del Plata

El quelonio, de 70 años y 99 kilos, se instalará en los próximos meses en el Centro de Rehabilitación de Fauna Marina Aquarium. La idea es que el animal se pueda rehabilitar en tres años para reinsertarse al medio ambiente.

El animal llegará una vez que terminé la temporada invernal. Foto: cortesía diario Los Andes.

4 de Julio de 2022 16:39

Por Redacción 0223

PARA 0223

Después de permanecer 38 años en cautiverio en Mendoza, el tortugo “Jorge” se mudará pronto al Centro de Rehabilitación de Fauna Marina que tiene Aquarium en Mar del Plata con la idea de encarar un plan de recuperación de tres años para poder reinsertarse definitivamente a su medio ambiente.

La novedad del viaje fue oficializada en los últimos días por la municipalidad mendocina y la confirmó a 0223 Alejandro Saubidet, director científico del parque marino, quien adelantó que el traslado se materializará una vez que pasen los fríos más fuertes para evitar alguna repercusión negativa en el quelonio, de 70 años y 99 kilos.

“No tenemos fecha para traerlo porque todo va a depender del tiempo. Si bien acá ya tenemos sistemas de calefacción y todo preparado para recibir a Jorge en cualquier momento del año, buscamos que llegue con un clima más templado. Así que cuando estén dadas las condiciones, lo recibiremos. Seguro que esto va a ocurrir antes de fin de año”, explicó el hombre de Aquarium.

Hoy, el animal se encuentra en un estanque de 20 mil litros de agua dulce del exacuario municipal de Mendoza pero cuando llegue al centro de rehabilitación de la ciudad permanecerá en una pileta con agua salada, de 150 mil litros, y ubicada al lado del mar. Esta pileta no está al alcance del público ya que Jorge en ningún momento se prestará a una exhibición.

Para minimizar los riesgos, Mendoza se comprometió a trasladar al tortugo en un vuelo de avión privado, a través de un contenedor especial con una base de colchón húmedo, tal como había pedido Aquarium. “La comuna ha decidido disponer de un avión privado para que nos aseguremos que el riesgo sea mínimo”, contó el subsecretario de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Capital, Sebastián Fermani.

El funcionario también aclaró que, más allá del traslado, la tutela legal seguirá por parte de la municipalidad de la ciudad de Mendoza, algo que se extenderá por los tres años que dure la rehabilitación de la tortuga macho.

 “El municipio no se desentiende de la situación del tortugo sino que  mantiene su tutela. Se estima que aproximadamente en tres años termine su fase de rehabilitación, porque hay que entrenar su musculatura, convivir con otros animales, tiene que aprender a comer por sí solo. Ante la modificación de cualquier variable tenemos que estar atentos en cómo responde”, dijo Fermani.

La rehabilitación supone un desafío difícil. Uno de los últimos objetivos planteados en el marco de esa misión es que Jorge pueda volver a ser capaz de procurarse alimento por sí mismo. Si el animal lo logra, entonces habría grandes chances de que pueda ser liberado para reencontrarse con su hábitat natural.

Jorge había llegado a Mendoza en 1984, luego de ser encontrado en una zona pesquera de Bahía Blanca, hacia donde se cree habría sido arrastrado por las corrientes marinas desde el Golfo de México, donde habitualmente habitan estas tortugas de gran tamaño. Según la comuna de esa provincia, el tortugo Jorge es el único de su especie que ha vivido tantos años en cautiverio.

El nombre (”Jorge”) surgió de un niño de unos 10 años que era un visitante frecuente de las instalaciones de la calle Ituzaingó (parque O’Higgins), hijo de inmigrantes, de nombre George, cuya versión en español se decidió aplicar al gigante marino.

En febrero de 2006, Jorge se mudó a un estanque de 20.000 litros de agua marina, tras las remodelaciones en el acuario municipal. En sus casi cuatro décadas en Mendoza, el tortugo se transformó en un emblema para el pueblo, además de ser un caso único en cautiverio por sus años de vida y buen estado de salud.