Tiene 11 años, viene de una familia de deportistas y se perfila como la nueva promesa del atletismo

Maia Monin se quedó por segundo año consecutivo con el podio de los 5k de mayores de la carrera del verano que se disputó en el circuito costero de la ciudad. 

Maia Monín hizo los 5k de verano en 17:54. Foto: Gentileza OpenSports.

27 de Enero de 2024 19:48

Sábado 20 de enero, 6 de la mañana. Miles de runners que van llegando a Plaza España para participar de los 10k de verano de Open Sports. Atletas de elite y runners llevan la remera del grupo en el que entrenan o la técnica de la carrera, y así empiezan con la entrada en calor.

La pequeña Maia se presenta acompañada por su familia para participar del evento que en su última edición la tuvo en el podio de los 5k. Si bien ella, al igual que su padre, contaba con la remera oficial, eligió usar la remera roja y amarilla de JM Corredores, el club en el que entrena y fundó su abuelo, le puso el dorsal, hizo toda la entrada en calor que conoce de memoria y entró a la manga bajo la atenta mirada de su madre, su padre y su abuela.

Para las siete de la mañana, hora en la que estaba pactada la largada, los 3 mil participantes del evento buscaban un lugar cerca de la salida que les permita hacer coincidir el tiempo oficial con el neto de carrera. Maia no le presta atención. Cuenta regresiva y sale junto a la marea verde que tiñe esa mañana el circuito costero rápido. 17 minutos y 54 segundos más tarde Maia llega, trenzas al viento, flequillos hacia atrás y con el rosario de cuentas lumínico que utiliza golpeándole el hombro derecho a la meta. El público que logró un lugar cerca del arco la aplaude y alienta, el animador del evento no da crédito a lo que ve: una nena de 11 años se quedó con el podio de los 5k de los mayores. Maia solo se enfoca en correr.

Maia Monín viene de una familia de atletas reconocidos en la ciudad: es nieta de la fondista Marcela Araujo, que representó al país en dos mundiales de atletismo y Jorge Monín, dueño del récord argentino en 5.000mts llanos. Su madre, Karen Cejas, es la actual campeona nacional de Cross Country y Ezequiel Monín, su padre y entrenador, cuenta con varias victorias en carreras de calle y en pista.

Ezequiel Monin, padre de Maia es el encargado de diseñar la rutina de entrenamiento de la menor. Foto: Gentileza OpenSports

No es la primera vez que Maia obtiene un lugar en el podio de los mayores. En la edición pasada de la carrera de verano también obtuvo el primer lugar con un tiempo de 18 minutos y 35 segundos. Para mejorar este tiempo, su padre elaboró una rutina de entrenamiento que consta de una hora de ejercicio de lunes a sábado, con el domingo como día de descanso.

La planificación se divide con los lunes, miércoles y viernes para realizar trotes durante media hora, más media hora de ejercicios técnicos. Los martes, jueves y sábado Maia hace trabajos de series, sin superar volúmenes de 2 kilómetros, para finalizar con un trote a ritmo suave.

Legado familiar

Tanto Maia como sus tres hermanas menores, Lucía, Isabella y Malena forman parte del grupo de menores de JM Corredores, uno de los grupos de running más grandes de Mar del Plata que fundó Jorge Monín, el hombre que el 11 de octubre de 1980 destronó a Osvaldo Suárez en los 5.000 mts. en el Torneo Internacional Ciudad de Buenos Aires que se disputó en la pista del entonces Cedena (actual Cenard).

Jorge Monin, abuelo de Maia tiene el récord argentino de 5 mil mts llanos.

Monín tenía 25 años y en esa oportunidad compitió con campeones olímpicos de diferentes países y logró un registro de 14 minutos 02 segundos. Quedó cuarto en la general y quebró el récord de su coterráneo Osvaldo Suárez.

Lo que siguió para Monin fue la consagración junto a los mejores fondistas de la época: fue campeón argentino en 5.000 y 10.000 metros y dedicó su vida al atletismo. En 2023 fue declarado ciudadano insigne por el Honorable Concejo Deliberante de General Pueyrredon.