El pueblo con pasado industrial que enamora con su paz y entorno natural

Este rincón de la Provincia combina historia industrial, vida espiritual y naturaleza. Un destino perfecto para escapadas tranquilas y con tradición.

El pueblo con pasado industrial que enamora con su paz y entorno natural.

27 de Junio de 2025 09:00

Por Redacción 0223

PARA 0223

En la provincia de Buenos Aires existen rincones poco explorados que conservan una identidad marcada por el trabajo, la fe y la vida comunitaria. Lugares donde las antiguas fábricas aún marcan el pulso de las calles, los árboles centenarios custodian las veredas y las costumbres criollas siguen vivas en cada encuentro barrial.

Estos pueblos, alejados del ruido urbano y de los grandes circuitos turísticos, invitan a reconectar con lo esencial: la tranquilidad, la historia compartida y la belleza natural. Caminar por sus calles es viajar en el tiempo, descubrir monumentos inesperados y disfrutar de una calma que reconforta el cuerpo y el alma.

Jáuregui, en el partido de Luján, es un destino que conjuga historia industrial, naturaleza, espiritualidad y vida de pueblo. Con su legado fabril, la Abadía de San Benito y el club Flandria, es ideal para quienes buscan una escapada cerca de La Plata que ofrezca tranquilidad, cultura y contacto con la historia.

En Luján, al igual que en distritos vecinos como Mercedes, Exaltación de la Cruz y Pilar, el gobierno de Axel Kicillof lleva adelante el Plan Maestro Integral de la Cuenca del Río Luján, financiado por la Provincia. Los trabajos comprenden una extensión de 42 kilómetros en esos municipios y están destinados a proteger a 1.500.000 de personas.

La obra consiste en la ampliación de la sección del cauce del río para incrementar la capacidad de evacuación de grandes caudales de agua e incluye el reemplazo y la ampliación de distintos puentes ubicados sobre el río para mejorar las condiciones actuales de escurrimiento y complementar las obras de conducción.

Jáuregui: un destino donde la historia y la paz caminan de la mano

En el corazón de la provincia de Buenos Aires, a pocos kilómetros de la ciudad de Luján, Jáuregui se presenta como un rincón que fusiona pasado industrial, vida comunitaria y belleza natural. A diferencia de otros pueblos turísticos, este se destaca por su serenidad y por conservar intactas muchas de sus tradiciones.

El legado fabril que transformó al pueblo

El origen de Jáuregui está estrechamente vinculado al desarrollo ferroviario. En 1884, gracias a la donación de tierras del empresario vasco José María Jáuregui, se instaló una estación del Ferrocarril del Oeste, lo que impulsó el crecimiento agrícola y ganadero de la zona.

Pero fue en 1928 cuando el pueblo vivió una revolución económica y social con la llegada del industrial belga Julio Steverlynck. Al adquirir el molino local y fundar la Algodonera Flandria, Jáuregui se convirtió en una comunidad modelo: con viviendas para empleados, clubes, escuelas y espacios verdes que aún perduran como símbolo de una planificación urbana ejemplar.

La Abadía de San Benito: espiritualidad entre arboledas

Otro de los grandes atractivos de Jáuregui es la Abadía de San Benito, un monasterio benedictino trasladado desde Buenos Aires en 1973. Rodeado de naturaleza, este espacio ofrece retiros, misas y momentos de introspección en un entorno de absoluto silencio y armonía. Su arquitectura sobria y elegante se integra con el paisaje y suma un valor espiritual al destino.

Un pueblo con vida propia

Jáuregui conserva una identidad fuerte y arraigada. Las fiestas populares, como la Fiesta de la Comida Criolla, congregan a residentes y turistas en jornadas donde la música folclórica, los bailes y la gastronomía típica generan un ambiente festivo y comunitario.

El fútbol también es parte del alma del pueblo. El Club Social y Deportivo Flandria, conocido como "El Canario", despierta pasiones locales y es un motivo de orgullo por su trayectoria en torneos nacionales.

Turismo rural y paisajes para desconectarse

El entorno natural, con el río Luján como eje, ofrece una gran variedad de actividades recreativas: desde caminatas y picnic hasta avistaje de aves o pesca. Las estancias de los alrededores abren sus puertas al turismo rural, permitiendo disfrutar de cabalgatas, comidas caseras y el contacto directo con la vida de campo.

Además, Jáuregui forma parte del circuito que incluye la Basílica de Luján, por lo que puede ser una parada ideal en escapadas de fin de semana para quienes buscan combinar espiritualidad, historia y aire puro.

Un fin de semana distinto, cerca de La Plata

A tan solo unas horas de La Plata, Jáuregui se presenta como un destino accesible y encantador. Perfecto para quienes desean escapar del ritmo urbano y redescubrir el valor de la historia, la calma y las tradiciones en un entorno natural privilegiado.