Barbarie en El Martillo: el fiscal pide juzgar a 5 personas por un salvaje crimen

Para la fiscalía actuaron con ánimo homicida y desplegaron actos de “barbarie inusitada”. Considera que cuatro hombres y una mujer actuaron en forma conjunta y coordinada.

Fotos: archivo 0223.

13 de Marzo de 2018 11:11

Por Redacción 0223

PARA 0223

A diez meses de la batalla campal que finalizó con el incendio de una vivienda y el linchamiento del sujeto acusado de matar a dos jóvenes en mayo del año pasado en el barrio El Martillo, el fiscal Fernando Berlingeri le solicitó a la Justicia de Garantías que se juzgue a los cinco imputados.

Para la fiscalía María Belén Palavecino, Mariano Iván Lescano, Javier Alberto Falcato, Angel Adrián Chávez y Alexis Rodrigo Juárez deben responder como autores del delito de incendio y homicidio doblemente agravado por su comisión con ensañamiento y con el concurso premeditado de más de dos personas, en concurso ideal. De manera simultánea se formó causa por separado para seguir la investigación ante la presunción de que otras dos personas tuvieron un grado similar de responsabilidad durante los hechos.

La investigación dio por probado que un número indeterminado de personas -entre las que se encontraban los cinco imputados- actuaron en forma  conjunta y coordinada desplegaron y se presentaron en la casa de Nelson Humberto Alderete en Sicilia 7190. Mediante la utilización de armas de fuego, exigieron a la familia que abandonara el lugar y posteriormente acorralararon a Alderete en el interior de una habitación de una casa ubicada a cien metros del lugar.

Tras efectuar una gran cantidad de disparos comenzaron a quemar a Alderete, lo sacaron del lugar, lo colocaron en Sicilia entre Coronel Vidal y Gutemberg Bis, lo taparon con pedazos de madera y volvieron a prenderlo fuego. Según la requisitoria de elevación a juicio, los imputados “actuaron con ánimo homicida, no solo desplegando actos de barbarie inusitada, de los que da cuenta la cantidad de proyectiles disparados contra Alderete, sino también por la mecánica utilizada para dar fin con la vida de éste”.

Para el fiscal los hechos se dieron en clara venganza “por lo que la turba consideraba justicia por mano propia” ya que Alderete fue el autor de los disparos que mataron pocas horas antes a Francisco Chávez y Brian Falcatto –de 15 y 17 años respectivamente- y las heridas sufridas por Alan Olivera. "El ataque fue tal magnitud y ensañamiento que no solo impedían que vecinos y/o terceros ajenos a la agresión ayudaran a la víctima y su familia, sino que impidieron la llegada de personal policial y de bomberos al lugar, sostuvo.

En su pedido a la Justicia de Garantías Berlingeri señaló que los imputados contaron con el apoyo logístico de otro grupo de personas no identificadas, que cercaron la cuadra donde estaba Alderete con su familia, atravesando vehículos y efectuando disparos de arma de fuego contra los móviles policiales que se acercaron con el fin de hacer cesar la agresión ilegítima de la cual estaban siendo víctimas. “Tampoco permitieron la llegada de los bomberos para impedir la propagación del fuego, el cual solo fue circunscripto gracias al actuar de los vecinos”, indicó.

En su pedido de elevación a juicio remarcó que la materialidad del hecho narrado y la coautoría penalmente responsable de María Belén Palavecino, Mariano Iván Lescano, Javier Alberto Falcato, Angel Adrián Chávez y Alexis Rodrigo Juárez están convincentemente demostrados en base a los indicios de sospechabilidad que surgen de las labores policiales, las actas de procedimiento, las testimoniales recabadas durante la investigación y las desgrabaciones de las conversaciones telefónicas que varios de los imputados mantuvieron por esas horas.

Para Berlingeri “se ha acreditado que los aquí sindicados han intervenido en un hecho común, al que han aportado con su acción cada uno de los imputados, ejecutando el hecho tal como se cometió”. En virtud de la calificación impuesta a los encartados consideró que “no resulta procedente solución alternativa alguna al presente” y solicitó la elevación a juicio de la causa.