Ingreso con números y circulación limitada: así volvieron a funcionar las ferias comunitarias

Con la intención de restringir al máximo la circulación de personas dentro de las instalaciones, las ferias comunitarias de Mar del Plata volvieron a trabajar desde este jueves durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por la pandemia del coronavirus.

Tras obtener el permiso del Gobierno, los tradicionales paseos de compras retomaron su actividad aunque con distintas medidas sanitarias específicas que apuntan a evitar la aglomeración de personas, una de las principales advertencias que traza el Ministerio de Salud ante el riesgo de contagio del Covid-19.

"Implementamos todos los espacios con aéreas determinadas, cantidad de gente limitada, para que no se aglomere mucha gente. Pedimos el uso de barbijo, y también hay en las entradas alcohol y trapos para que la gente se higienice", comentó Romeo, gerente general de la Feria Comunitaria que está sobre la avenida Independencia y Primera Junta.

En diálogo con 0223, el responsable del paseo dijo que dispuso personal en las entradas para "controlar" el ingreso de los clientes. "Se regula la entrada, se da número, y en base al negocio que está funcionando, se habilita el paso", explicó.

"Cada comercio hizo un aislamiento particular, con nylon o plásticos o vidrio para que haya distancia entre cliente y el operador de la feria", confirmó el comerciante, quien aseguró que protocolos con similares características se aplicaron en el resto de las ferias de la ciudad.

Romero ratificó la intención del sector de "acompañar" frente a la compleja situación sanitaria. "Hubo rubros no habilitados y tuvieron que cerrar su local y otros se adecuaron. Fue todo improvisado porque se veía, tal como decía el Gobierno, el día a día e ir corrigiendo errores para tratar de optimizar el movimiento de la feria", comentó.