Los seis homicidios del año que aún siguen sin detenidos ni sospechosos

Nunca tuvieron aprehendidos ni pistas firmes. Uno de los hechos ni siquiera tiene la confirmación oficial de la identidad de la víctima.

Las causas no tuvieron avances más allá de las tareas que se ordenaron.

31 de Diciembre de 2021 12:34

Por Redacción 0223

PARA 0223

Mar del Plata cierra el 2021 con 41 homicidios tras una racha de casi dos meses sin hechos de ese tipo que se convirtió en la más extensa de los últimos siete años y que llegó a su fin con el crimen de Julio Ricardo Villarreal en una vivienda del barrio Santa Rita. Aunque en la gran mayoría se avanzó en el esclarecimiento y hay personas imputadas, muchos de ellos en condición de detenidos cumpliendo prisión preventiva, en seis casos no se lograron pistas firmes para el esclareceimiento.

El 13 de enero el músico Pablo Ojeda regresaba a su departamento en la calle Jujuy entre Alberti y Rawson cuando fue abordado por al menos dos personas con fines de robo. El intento de sustraerle su camioneta Toyota Hilux no prosperó –el rodado quedó cerrado frente al edificio- y el músico de 58 años murió tras recibir un balazo en el cuello.

El crimen fue el tercero del año y se convirtió en el primero en el que, más allá de las tareas realizadas por el personal de la fiscalía a cargo en ese momento de Fernando Castro, nunca se estuvo cerca de la resolución. La hipótesis firme para los investigadores fue que al menos dos ladrones le dispararon al intentar sustraerle la camioneta.

En este lugar mataron a Ojeda (Foto:archivo 0223).

El segundo homicidio en el que no existen pistas firmes tuvo como víctima a Teresa Jaúregui, una mujer de 85 años que fue hallada el 15 de febrero en el interior de su casa en Chacabuco y 20 de Septiembre. Tras confirmar que la data de muerte era anterior, la investigación quedó en la Unidad Fiscal de Instrucción 6 y más allá de confirmar que fue un hecho en ocasión de robo en ningún momento pudo siquiera identificar a un sospechoso.

La muerte de Andrés Contreras se registró el 15 de junio tras varios días de internación en el Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) luego de que lo balearan en un confuso hecho en el barrio Nuevo Golf. Si bien por ese hecho se realizaron cinco allanamientos en el que aprehendieron a dos personas, la responsabilidad de ambos está relacionada a un incidente que se produjo en el mismo lugar y nunca fueron acusados del ataque a tiros.

En la causa se hicieron cinco allanamientos. (Foto:archivo 0223).

“Nunca estuvo claro si el ataque que sufrió se debió a una discusión anterior con un grupo de personas en el barrio o una pelea por la compra de estupefacientes y desde el inicio fue imposible que las personas del lugar dieran detalles de lo sucedido”, indicaron fuentes cercanas al expediente.

El crimen de Hugo Rubén Monzón (47) fue uno de los diez que se registraron durante el mes de julio y no ha tenido avances significativos hasta el momento. Si bien allegados a la víctima fueron recibidos en más de una oportunidad por la fiscal a cargo de la causa, la semana pasada realizaron un reclamo en Tribunales para reclamar por la identificación del sujeto que lo mató de un piedrazo en las puertas del Instituto Punta Mogotes para robarle la moto y sus pertenencias.

El 27 de julio pasado Lucas Ordoñez fue asesinado durante la madrugada en el barrio Jorge Newbery en un enfrentamiento a tiros y junto a su cuerpo hallaron un arma que había sido robada a un policía durante el Operativo Sol. La falta de testigos en una zona calificada como “complicada” y en la que días después fue allanado un inmueble en una causa por estupefacientes han impedido avanzar en el esclarecimiento del hecho.

El quinto homicidio que compone esta lista tiene la particularidad de no tener aún identificada a la víctima de manera oficial y quedó al descubierto el 10 de septiembre cuando personal de una empresa de limpieza halló los restos en avanzado estado de descomposición en el departamento B del piso 18 B. Si bien a partir de los datos recabados por el fiscal Leandro Arévalo se estima que serían los restos de Pedro De Tomaso (72), aún resta la confirmación del análisis de ADN que se ordenó y del cotejo con las muestras de una hermana.

La lista se cierra con el homicidio de Jorge Martín Otero que falleció tras estar tres meses internado en el Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) luego de una golpiza que sufrió el 1 de junio en la zona del Monte Varela. La singularidad del caso es que la Justicia recién se enteró con el deceso confirmado que el hombre de 44 años había sido atacado a golpes.

Desde la Unidad Funcional de Instrucción 1 intentaron reconstruir lo sucedido, pero fue imposible por un tremendo error inicial: no existían actuaciones policiales por la agresión que derivó en la internación de la víctima. “Es una causa que no tiene arreglo y por la que desafectaron al oficial que no tomó la denuncia ni comunicó lo sucedido”, explicaron desde la Justicia a este medio.

En un año que tuvo una racha de casi dos meses sin homicidios después de un inicio de año que preanunciaba un salto con relación al 2020, estos seis homicidios tienen en común la falta de datos para poder identificar a los sospechosos y avanzar en su hallazgo. Más allá de las características singulares de cada uno, están en un laberinto del que será muy difícil salir para su esclarecimiento.