Declaró y quedó en libertad una de las policías acusadas de torturar a dos adolescentes

La oficial Micaela Estigarribia confirmó los dichos de las víctimas. Le atribuyen un rol pasivo y seguirá imputada en la causa.

5 de Octubre de 2022 16:09

Por Redacción 0223

PARA 0223

Una de las cuatro policías acusadas de torturar a dos adolescentes en un descampado a mediados del mes pasado quedó en libertad este miércoles tras prestar declaración ante el fiscal Juan Pablo Lódola al entender que tuvo un rol pasivo durante los hechos tal como habían relatado las víctimas. A partir de ello, el funcionario consideró que tuvo una participación secundaria y adelantó que no iba a pedir su prisión preventiva y la Jueza de Garantía Rosa Frende ordenó su libertad.

Micaela Estigarrabia declaró por más de dos horas acompañada por su abogada Adelina Martorella y relató los hechos registrados esa noche en los que no manejó móvil alguno ni extrajo su arma en ningún momento. "Sus dichos la ubican fuera del trío agresor y coinciden con lo señalado por los adolescentes en su declaración y con la descripción física que hicieron", dijo una fuente judicial a 0223.

La oficial que seguirá imputada, pero en libertad, fue la única que decidió declarar este miércoles luego de que sus compañeros Ariel Estévez y Jonathan Cabrera -acompañados por el defensor oficial Claudio De Miguel- y la sargento Vanesa Cano, asesorada por Martín Bernat, se negaran a dar su versión de los hechos poco antes del mediodía.

Roles y participación

Si bien en el pedido de detención que hizo la fiscalía se había señalado que el primero de los móviles que llegó a Berutti al 9100 fue el de Estévez y Cano, éste miércoles se confirmó que existió un error involuntario al dar los números de los patrulleros y que las actitudes atribuídas a Estigarrabía fueron de la otra oficial. "Esa confusión se subsanó al momento de la indagatoria y de leerle a cada uno de los policías la imputación que pesaba sobre ellos", agregaron.

“Ahora van a ver cómo los matamos y nadie se entera, como yo tengo un montón de muertos y nadie se enteró. Dos más no me van a hacer nada”, fue una de las amenazas que denunciaron los adolescentes. A partir de la aclaración, se entiende que la misma estuvo a cargo de Cano y no de Estigarribia. 

En el mismo sentido, fue Estévez quien se bajó del patrullero y le pegó una trompada al adolescente de 14 años. Cabrera, en tanto, sacó el arma reglamentaria y se la apoyó en las costillas. “Si gritás te mato”, le advirtió para luego gatillarle en la cabeza, mientras Cano intentó colocarle el arma en la boca.

En el marco de la sintonía de su declaración los dichos de las víctimas, la oficial dijo que estaba ubicada a unos metros y que había una luz que apuntaba a los chicos que podría ser el celular con el que se habría filmado toda la situación. Si quedó un registró del ataque en algún celular, podrá definirse a partir del 28 de octubre cuando se analicen los celulares secuestrados durante los allanamientos simultáneos.

Pedido de cambio de compañero

La abogada Adelina Martorella confirmó que tras los sucesos de esa noche Estigarribia solicitó en la comisaría un cambio de compañero de móvil y que a partir de ese momento Cabrera y Cano compartieron patrullero mientras que Estévez quedó sin un compañero fijo. "Los tres le dijeron que no iba a pasar nada y que en todo caso debían decir lo mismo", detalló la profesional a 0223.

Traslado de uno de los policías detenidos.

"Es un hecho aborrecible, algo que no puede suceder de ninguna manera, pero ella no tuvo participación porque no manejaba el rodado, no agredió y no sacó su arma en ningún momento", agregó. 

En cuanto a la actividad posterior de su defendida, dijo que buscó ayuda para ver dónde tenían que declarar y que le informaron que debía esperar a que la llamara la fiscalía. "Cuando fue a la Dirección Asesoría Letrada de Policía le preguntaron si había tenido alguna notificación y como no había nada le dijeron que convenía esperar", señaló.