Violencia contra un ciclista: ex soldado de Malvinas fue golpeado por el conductor de una camioneta

El violento hecho se difundió en las redes sociales y generó el absoluto rechazo de los usuarios.

Foto y crédito: Diario Necochea.

21 de Agosto de 2025 12:53

Por Redacción 0223

PARA 0223

Más allá de las discusiones de tránsito que, tristemente, se han vuelto habituales por el crecimiento del parque automotor de las ciudades de la zona y la violencia social, los conflictos en rutas provinciales se están repitiendo con aficionados al deporte.

Los hechos ocurrieron en Quequén, más precisamente en la calle 504, por la zona de Bahía de los Vientos. El vecino Sergio Senyk, veterano de guerra, se movilizaba en bicicleta en dirección a Costa Bonita, cuando se encontró con una camioneta Toyota Land Cruiser que venía en la dirección contraria, presuntamente a una velocidad elevada.

Mediante un video que se viralizó en las redes sociales, Senyk afirmó que le hizo señas con sus manos al conductor para que bajara la velocidad, pero este "hizo 100 metros, giró, me tiró la camioneta encima, se bajó y directamente me empezó a golpear".

En cuanto a las características físicas del agresor, Senyk detalló que se trataba de hombre de unos 60 años, bajo y con boina. El ex soldado señaló también que la camioneta circulaba a unos 70 km por hora y no llevaba paragolpes. La agresión contra un ciudadano que arriesgó su vida por el país, generó bronca e indignación en la población. Veteranos de Malvinas y vecinos expresaron su repudio, y la justicia ya se encuentra investigando el episodio, para identificar al agresor.

La historia de un soldado de la Patria

Senyk tiene 62 años, y si bien es oriundo de Capital Federal, vive en Necochea desde hace varios años. De ascendencia polaca, perdió a sus padres de muy joven, y cuando le tocó hacer el servicio militar firmó como voluntario para hacer paracaidismo, recibiendo entrenamiento también en artillería.

Cuando estalló la guerra, fue trasladado a las Islas, donde además de los ataques militares de los ingleses, le tocó atravesar hambre y las deficiencias en la logística del ejercito argentino. Senyk pudo sobrevivir a la guerra, pero con heridas, ya que la onda expansiva de un proyectil que estalló a pocos metros de su posición, le destrozó el tímpano. Luego de la guerra, uso el deporte como una vía para superar las secuelas del conflicto, algo que sigue practicando con su bicicleta por las calles de Necochea y Quequén.