Los Galancitos: el verano en el que Carlín Calvo, Ricardo Darín y el “Facha” Martel jugaron a ser Maradona
A comienzos de los ochenta, un grupo de jóvenes actores encontró en el fútbol una nueva manera de acercarse al público. Motivados por la pasión nacional y con la intención de colaborar en causas benéficas, formaron un equipo que recorrió el país, enfrentando a periodistas y leyendas deportivas. Entre ellos estaban Carlos Calvo, Ricardo Darín y Adrián “el Facha” Martel, entre otros. Debutaron en Mar del Plata.
El 23 de febrero de 1981, el estadio Mundialista no estaba completo, pero un gran número de espectadores asistió al encuentro. Se trató de un partido muy especial: de un lado, once actores, todos ellos galanes que hacían su temporada en Mar del Plata, del otro, once periodistas de la ciudad. El objetivo era realizar una jornada solidaria y recaudar lo máximo posible para ayudar a los más necesitados.
Adrián “el Facha” Martel aseguró: "Yo fundé el equipo de Los Galanes. Hasta la llegada de Carlín Calvo, Ricardo Darín, Mayorano, Grandinetti y Taibo, éramos el equipo de los actores, pero no nos conocía nadie. Salvo Pablo Codevilla y Hugo Arana, el resto no existíamos”.
Lo cierto es que, a partir de ese momento, juntos recorrieron el país jugando partidos a beneficio de distintas instituciones, enfrentándose a viejas glorias locales o a conjuntos integrados por periodistas.
Carlín Calvo, la estrella de la noche
En el partido de aquel 23 de febrero de 1981, uno de Los Galancitos se destacó por sus goles. Se trata de Carlín Calvo, quien demostró sus grandes dotes de futbolista, aportando dos de los goles que sellaron la victoria de 4 a 1 sobre los periodistas locales. Describen que su desempeño fue tan impresionante que el relator Oscar Gañete Blasco, a quien acompañaba en los comentarios Mario Truco, lo bautizó con un apodo que quedaría para la historia: Diego Armando Calvo. (Se cuenta que Calvo quiso en 1997 que una de sus jugadas de aquel partido formara parte de la presentación de R.R.D.T., la tira de Pol-ka en la que hacía de entrenador de Excursionistas, pero Adrián Suar, productor del ciclo, se negó porque el tape era de mala calidad).
En algún momento de su vida, Calvo se había probado en Deportivo Morón y en Platense, pero sin suerte. El otro actor con algo de experiencia en el fútbol profesional era el “Facha” Martel, quien había jugado seis meses en la liga marplatense. Grandinetti también tuvo su experiencia en Newell’s de Rosario, donde participó de las inferiores del club. Sin embargo, el resto del plantel no tenía grandes antecedentes, pero sí un técnico de renombre: en el banco de Los Galancitos estaba César Luis Menotti, técnico de la selección campeona del mundo en 1978.
Los Galancitos, con camiseta roja, y los Periodistas, de blanco, dieron un espectáculo más que atractivo para los plateístas que se acercaron aquel día. Hubo fotos, vuelta olímpica, saludos y muchos goles. Aunque Ricardo Darín intentó reiteradas veces el suyo, no lo logró, resultando como figura del partido Carlín Calvo.
El primer gol del partido lo convirtió Carlos Olivieri para el equipo de Los Galancitos, con un “sombrerito” incluido. El segundo fue de penal, convertido por Carlín Calvo, y el tercero también de Olivieri, por arriba del arquero. Para el cuarto gol, Carlín se guardaba la mejor carta, ya que, luego de una jugada “maradoniana” que dejó en el camino a más de cuatro rivales, Calvo convirtió el último tanto del partido. Los periodistas solo pudieron hacer uno, dando como resultado final el 4 a 1 del que tanto se habla todavía.
Dentro del equipo de los periodistas se nombró a Chávez, Catalano, Romano, Quinteros y Fontán, quien en el segundo tiempo tuvo una actuación muy merecida en el arco, y, entre otros, a Luque, quien convirtió el único gol de su equipo.
Los Galancitos y Maradona en Mar del Plata
Ese mismo año 1981, Los Galancitos decidieron ir a jugar un papi fútbol a Kimberley. ¿Los motivos? No solo para que sirva de entrenamiento, sino también porque iban a tener un invitado muy especial: un jugador que se proyectaba como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, Diego Armando Maradona.
Como se cuenta en una nota de 0223 del 30 de octubre de 2024, “Los hinchas de Kimberley no lo podían creer: estaban reunidos en el club como habitualmente lo hacían, fueron a ver un picado que se armó en el gimnasio de la sede de Independencia 3030, pero no jugaba uno cualquiera. Diego deleitó al reducido grupo de personas que presenciaron una función exclusiva (…) La popularidad propia y de quien se proyectaba como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, obligó a "esconderse" en algunas oportunidades para disfrutar. Así, decidieron ir a jugar un papi fútbol a Kimberley, sin hacer correr la bola (valga la redundancia). Pero no pudieron escapar a la mirada de los socios que se encontraban pasando su tarde en la sede del barrio San José. Muchos de ellos, chicos. Atónitos ante el fútbol que veían sus ojos”.
Los orígenes y la despedida
Originalmente conocidos como Los Actores, el equipo adquirió una nueva identidad con la incorporación de figuras como Ricardo Darín, Raúl Taibo, Darío Grandinetti y el propio Calvo, una nueva generación que venía de protagonizar novelas exitosas y muchas tapas de revistas.
Así nacieron Los Galancitos. Ya sin Menotti en el banco, pero ahora bajo la dirección técnica de Luis Tasca, comenzaron a recorrer el país para disputar numerosos encuentros a beneficio en distintas ciudades. Firmaban autógrafos, compartían anécdotas con los fans y, entre partido y partido, disfrutaban de la fama y camaradería que el grupo había cultivado. Raúl Taibo contó que al micro en el que viajaban “lo llamábamos ‘el micro del amor’, y firmábamos autógrafos, comíamos bocaditos, nos sacábamos fotos...”.
Durante la década que se extendió la experiencia de Los Galancitos, se intercambiaron algunos nombres y pasaron por el equipo actores como Rodolfo Bebán, Claudio García Satur, Gonzalo Urtizberea o Miguel Ángel Solá. Así como se fue dando el recambio generacional con la llegada de Pablo Rago o Diego Torres ya en los noventa.
En 1991, diez años después de su inicio, el equipo se despidió con un emotivo partido a beneficio del Hospital Fernández, en homenaje al actor Adrián Ghio, que había fallecido en ese lugar después de un brutal accidente de tránsito. Futbolistas Argentinos Agremiados participó del evento y sumó, nada más ni nada menos que, la presencia de Diego Armando Maradona.
Un cierre más que digno para la historia de Los Galancitos, una historia que hoy sigue viva en la memoria de quienes los vieron jugar, porque más que un equipo de fútbol, fueron un fenómeno cultural, una mezcla de talento, carisma y solidaridad que dejó huella en el espectáculo y el deporte argentino.
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