Octubre mantuvo la tendencia creciente de homicidios en la ciudad

Los siete homicidios registrados durante el mes de septiembre en Mar del Plata igualan la cantidad del mes anterior aunque proyectan cerrar el año con un número mayor de homicidios que 2018. A falta de dos meses se registraron 39 homicidios, muy cerca de los 44 del año pasado y ya por encima de los 38 de 2017.

Comparado con el bimestre julio-agosto lo sucedido estos dos últimos meses marca el salto estadístico más grande en lo que va del año: de cuatro hechos se pasó a catorce.

Octubre comenzó con el crimen de Calixto Medeiro en su casa del barrio San Jacinto cuando recibió cuatro disparos que impactaron en su cabeza, abdomen, una pierna y un brazo. Si bien el hombre de 50 años fue trasladado de urgencia, murió antes de llegar al Hospital Interzonal General de Agudos (Higa).

La investigación a cargo del fiscal Juan Pablo Lódola apuntó desde un comienzo a un hecho relacionado con un ajuste de cuentas, aunque el silencio de vecinos y allegados impidió hasta el momento avanzar en su esclarecimiento.

Cuatro días más tarde Lucas Miracco (17) fue baleado en la cabeza en inmediaciones de las calles Génova y Cerrito, en el barrio Cerrito Sur. La víctima iba a bordo de un automóvil Toyota Corolla con otras dos personas y perseguían a las personas que supuestamente le habían robado la motocicleta a un amigo.

El adolescente falleció tras agonizar cuatro días en el Higa y la causa fue derivada al Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil. En la investigación a cargo del fiscal Marcelo Yanez Urrutia hay cinco aprehendidos: dos mayores y tres menores que se negaron a declarar.

El 16 de octubre se produjo el único de los homicidios en ocasión de robo cuando tres delincuentes ingresaron durante el cierre del local que Gerard Broja Pastrana tenía en la calle 9 de Julio casi Mitre. Tras intentar sustraerle la recaudación, uno de ellos le efectuó un disparo que terminó siendo mortal.

El rápido cotejo de las imágenes registradas en varias cámaras de monitoreo de la zona por parte del personal policial permitió identificar el auto en el que se desplazaban los delincuente y detener pocas horas después al principal sospechoso, identificado como Gabriel Dorigo. Nueve días después del crimen y en el marco de la causa a cargo del fiscal Leandro Arévalo también atraparon a su cómplice Alejandro Daniel Gamarra.

Diez días pasaron después Andrea Flores fue detenida en su casa del barrio Fortunato de la Plaza tras matar de una puñalada en el cuello a su pareja tras una violenta discusión. Daniel Heredia –de 41 años- murió en el interior de la casa ubicada en Arana y Goiri al 8100 y su pareja se negó a declarar ante la fiscal Andrea Gómez y permanece detenida.

El turno de la Unidad Fiscal de Instrucción 4 se cerró con otro homicidio de características similares, pero con una resolución diferente. Margarita Villarruel fue detenida por matar a su pareja de una puñalada en el patio de la casa que compartían junto a sus hijos en el barrio 9 de Julio.

La mujer de 27 años recuperó su libertad este miércoles tras el pedido que la fiscal Andrea Gómez hizo a la Justicia de Garantías al escuchar su declaración y confirmar los datos previos que tenían los investigadores: Villarruel apuñaló a Alejandro César para defenderse de ataque al que era sometida en el patio de la vivienda.

Dos ataques cometidos en la calle el martes 29 de octubre dejaron como saldo –con pocas horas de diferencia- los últimos dos homicidios del mes cuya investigación está a cargo del fiscal Alejandro Pelegrinelli. Uno de ellos está esclarecido y el restante está en plena etapa de recopilación de pruebas.

A partir de la cantidad de testigos presentes durante el ataque, el homicidio de Matías Espíndola estuvo esclarecido desde el comienzo. Allegados y vecinos de la victimas de 32 años vieron cuando Christian Bustos lo interceptó en la esquina de República del Libano y Maipú tras una discusión que se extendió por más de media cuadra y le asestó dos puñaladas que lo mataron prácticamente en el acto.

Aunque el imputado de 29 años escapó del lugar, un día más tarde se presentó en Tribunales y quedó detenido en la Unidad Penal 44 de Batán.

Más temprano ese mismo martes, cuatro sujetos se acercaron en un auto negro al local ubicado en la avenida Arturo Alió y Rivadavia y le dispararon tras un cambio de palabras a Juan Carlos Rodríguez. Uno de los balazos lo hirió en el abdomen y el comerciante de 61 años fue trasladado de urgencia al Higa, donde murió veinticuatro horas más tarde.

El crimen de Rodríguez y el de Medeiro con el que se abrió la estadística del mes son los únicos que no tienen imputados por el momento.

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