Pliego de transporte: por qué la nueva concesión debe ser a 20 años

Ante las críticas de la oposición y otros sectores durante las últimas semanas, desde el Gobierno de Guillermo Montenegro fundamentaron los motivos para determinar el plazo de contratación.

14 de Febrero de 2021 19:00

Por Redacción 0223

PARA 0223

Durante las 34 reuniones en las que se puso sobre la mesa de debate el nuevo pliego de transporte que presentó el Gobierno de Guillermo Montenegro, una de las mayores críticas estuvo vinculada con los 20 años de concesión del servicio que planteó el oficialismo, algo que fue tildado de "excesivo" tanto por voces de la oposición y de otros sectores como el Colegio de Arquitectos. 

Dante Galván, el Subsecretario de Movilidad Urbana del Municipio, argumentó las distintas razones del plazo de contratación que se estipuló y desmintió que solo se haya pensado con el fin de que el próximo concesionario pueda "amortizar su inversión".

Según el funcionario, se plantea en el pliego 20 años de concesión y la posibilidad de avanzar con cinco años de prórroga porque "la posibilidad de dar un período de funcionamiento más amplio es más atractivo para las empresas que quieran competir" en la licitación internacional que se confeccionó.

"Sabemos también que hay una inversión alta en infraestructura y después hay que amortizarla a lo largo de los años. Si se reduce mucho, lógicamente que habrá un impacto directo en la tarifa que también tenemos que trabajar", razonó el referente de la cartera de Transporte municipal.

Además, el ingeniero reconoció que Servicio Integrado de Transporte Urbano (Situ), que plantea una lógica de recorridos distinta al sistema actual, no puede materializar cambios estructurales de fondo en un "tiempo muy corto". "Si se hace todo en un tiempo muy breve, sería un trastorno para los usuarios y para la misma gestión", consideró.

El boleto estudiantil y la gratuidad

En una extensa entrevista que le concedió a 0223 Radio, el funcionario sostuvo que no se incluyó dentro del Situ el boleto sin costo para estudiantes universitarios y terciarios porque "no hay ningún subsidio detrás" que se haga cargo de solventar económicamente cada uno de esos viajes.

Si bien esta iniciativa ya está garantizada desde 2015 a través de la ley provincial 14.735, el subsecretario municipal advirtió que el Gobierno bonaerense todavía no pactó ningún convenio en Mar del Plata para destinar fondos que amplíen la gratuidad del servicio de transporte, que hoy ronda el 16,5 por ciento a nivel local.

Galván citó como ejemplo al municipio de Avellaneda, donde hay acuerdos firmados al respecto que permiten que el estudiante que se sube al colectivo pague un boleto subsidiado con un "sistema transparente". "Estamos abiertos a que la Provincia incorpore a nuestra universidad y lo podamos implementar pero hasta ahora no hay subsidios. Apostamos a que eso se pueda firmar en algún momento", aclaró.

Cláusula antimonopólica

Otra de las críticas más fuertes de la oposición giró en torno a este aspecto pero el responsable del área de Movilidad Urbana recordó que, desde un principio, el pliego plantea la "obligación de contratar a tres empresas diferentes". 

De todos modos, el funcionario aseguró que a partir de algunos planteos que hicieron los dirigentes opositores y actores locales "se van a agregar algunas cosas más" para fortalecer la lógica antimonopólica. "El pliego, desde su inicio, ha sido antimonópolico pero sí hay que reforzar algún concepto lo vamos a trabajar", garantizó.

Galván, además, reconoció que el debate que se dio en el ámbito del Concejo Deliberante, con un audiencia pública de por medio, fue "fructífero" para poder mejorar el expediente que inicialmente se acercó a fines del año pasado. "Entendemos que estamos en el cierre del debate y del pliego. Está claro que el pliego ha cambiado a partir de los planteos que escuchamos. Es un proceso largo pero que ha sido bueno y que evaluamos como positivo", ratificó. 

Accesibilidad 

Frente a las críticas por la "baja cuota inicial" que se exige a las empresas de incorpora colectivos de piso bajo, el funcionario de Montenegro sostuvo que el pliego licitatorio que se diseñó "no solo plantea un inicio sino un desarrollo en el cual el objetivo es la accesibilidad universal". "Están claramente marcadas las pautas a futuro. No se deja nada librado al azar", aseguró.

La flota que tendría plena accesibilidad desde un comienzo sería la línea Anular, una de las principales dentro del Situ, y luego hay un planteo de "incorporación gradual" en el resto de las unidades "hasta llegar al 100 por ciento", según precisó.

"El Ejecutivo también tiene que generar infraestructura para seguir incorporando piso bajo. Hoy, en parte de los recorridos que se diagraman no puede entrar el piso bajo por las calles. Hay limitaciones físicas, que con un cronograma de obra, se va a tener que asegurar para incorporar más adelante", explicó.

Aumento del boleto

En primer lugar, Galván recordó que se incorporó la participación de la Facultad de Ciencias Económicas para definir el cálculo y la metodología de costo de la tarifa plana del transporte público y adelantó que "se está trabajando para que la misma universidad pueda realizar las futuras actualizaciones" de precios.

Y también, tras los debates que se plantearon en la audiencia pública, el referente de Transporte dijo que se piensa dar "difusión de los costos del cálculo de la tarifa y de la metodología" a toda la comunidad una vez que se definan ajustes tarifarios. "Eso nos parece bueno porque daría más transparencia", consideró.

Más controles e infracciones

El subsecretario de Movilidad Urbana afirmó que el "nuevo pliego incorpora y asegura herramientas de control necesarias para gestionar un sistema diferente". "El pliego actual nos da herramientas para penalizar que son mucho más precarias de lo que realmente necesitamos", apuntó.

En este aspecto, destacó la incorporación de tecnología en los vehículos, desde la instalación de cámaras "hasta la posibilidad de saber cuál es el factor de ocupación de los colectivos e inclusive la posibilidad de seguir los viajes de los usuarios". "Hoy no sabemos dónde se baja un usuario, cuál es el destino de ese viaje, y la reestructuración de las líneas depende del seguimiento de los usuarios", ejemplificó.

Galván señaló que "el seguimiento de la flota mediante los sistemas de la tarjeta Sube aseguran la posibilidad de controlar frecuencias" pero también instó a trabajar con la "tecnología como soporte" y no solo con los inspectores de campo.

"Se planteó la alternativa de qué determinado montos de boletos planos sean recurribles y esas cosas son claramente superiores a lo que hay hoy. Va a haber infracciones que serán realmente efectivas porque hay que tener cuenta que cada falencia del servicio el usuario la termina sufriendo igual", reconoció.