Señales de convivencia y diálogo en el Concejo: ¿cambio de época?

En las últimas semanas hubo mayor nivel de acuerdo entre el oficialismo y la oposición. 

El Concejo encontó un camino de mejo diálogo entre las distintas fuerzas.

13 de Julio de 2022 21:01

Cuando los reflectores se posicionan de lleno sobre un objeto se exponen, con mayor claridad, los desperfectos. Cuando el haz de luz se amplía esos desperfectos pasan desapercibidos y se puede apreciar el contexto. Eso ocurre hoy en el Concejo Deliberante, que tiene una dinámica de tensión por las diferencias entre el oficialismo y la oposición, pero con un algunos gestos de convivencia y mayor diálogo que permiten destrabar algunas cuestiones.

La forma en la que se resolvieron las fotomultas fue un punto de inflexión”, admite una fuente del interbloque oficialista. El expediente tuvo un manejo sinuoso por parte del oficialismo y a partir de allí cualquier tipo de acuerdo con la oposición quedó obturado. Tampoco, vale aclarar, había mucho margen: el Ejecutivo envió un convenio ya firmado con la Universidad Nacional de San Martín y el Concejo sólo podía convalidarlo o rechazarlo.

El intendente Guillermo Montenegro resuelto desde el principio en conseguir que ese convenio se implemente en Mar del Plata encontró la llave en una modificación aprobada por la Legislatura provincial a la Ley Orgánica de las Municipalidades y puso en vigencia el convenio.

La maniobra fue denunciada por la oposición (el Frente de Todos pidió al Tribunal de Cuentas de la Provincia que se expida sobre la validez) y también generó incomodidad en la Unión Cívica Radical, principal aliado de Montenegro, que optó por no hablar del tema.

A partir de allí, el cuerpo encontró una dinámica más eficaz: el oficialismo encontró algunos caminos para avanzar y la oposición, los suyos, para establecer las diferencias. “Hubo algunos entendimientos”, concede un concejal oficialista, mientras que otro lo adjudica a un cambio de postura en el bloque del Frente de Todos. “Creo que tienen una estrategia distinta y eso ayuda a que se pueda avanzar en algunas cuestiones”, plantea.

Ese cambio, por ejemplo, permitió que el tema de la Zona Roja saliera del Concejo Deliberante. El oficialismo tomó varios de los planteos que realizó la concejal del FdT Sol de la Torre, aunque no cedió en la sanción con multas y arresto a quienes ejerzan la prostitución en zonas no habilitadas.

Tanto el FdT como Acción Marplatense, con críticas muy fuertes al proyecto, eligieron un camino alternativo que fue presentar su propio dictamen para sacar del ámbito legislativo el tema y ahora el Ejecutivo tiene 45 días para definir cuáles serán las zonas habilitadas.

Sin embargo, el “cambio” no puede adjudicarse solo al principal bloque opositor. El interbloque de Juntos también mostró una cara más flexible. Por caso, la citación al Concejo Deliberante del secretario de Cultura, Carlos Balmaceda, para que dé explicaciones fue aprobada por unanimidad. “La falta de respuesta a los pedidos de informe era inaceptable”, admite un concejal del radicalismo.

Carlos Balmaceda tuvo que dar explicaciones en la comisión de Educación y Cultura del Concejo.

 

Algún conocedor de los pasillos del cuerpo legislativo podría argumentar que la relación entre los distintos sectores del oficialismo en el Concejo con el funcionario no es la mejor. Sin embargo, tampoco hubo reparos para que el secretario de Seguridad, Martín Ferlauto (del riñón montenegrista), asista a defender el sistema de reconocimiento facial.

Es más: tampoco habrá trabas para que avancen los pedidos de informes presentados por la presencia de una patrulla municipal en el trágico cumpleaños del polémico Mauricio Ríos, un hecho de fuerte repercusión en la opinión pública y que por eso admite el abuso de los calificativos.

 

Qué pasará con el manejo de los residuos y el reconocimiento facial

Esta nueva dinámica permite al oficialismo tener mejores expectativas sobre el avance de algunos proyectos. En este momento, hay dos clave: el de la disposición final de residuos y el reconocimiento facial.

El primero tiene pendiente la recorrida de los concejales por el predio ubicado sobre la avenida Antártida Argentina para ver el estado actual. El antecedente inmediato no es el mejor: la concejal de AM Paula Mantero quiso ir por su cuenta y no sólo le impidieron el acceso, sino que la intimidaron cuando quiso sacar fotos desde el exterior.

Sebastián D'Andrea explicó en el Concejo el pliego para el manejo de los residuos.

 

El presidente del Emsur, Sebastián D’Andrea, le pidió disculpas durante su paso por la comisión de Ambiente para explicar los alcances del pliego. Más allá de ese momento tenso, desde el oficialismo reconocen que el intercambio fue productivo y “sensato”, según define un edil de Juntos.

Desde la oposición advierten que la recorrida seguramente abrirá un nuevo abanico de preguntas, por lo que no descartan volver a citar al presidente del Emsur. “Siempre se mostró predispuesto a ir y a dar las explicaciones necesarias”, reconocen en el FdT. A partir de allí, se verá qué modificaciones surgen al pliego de bases y condiciones aunque en todas las bancadas hay una coincidencia: el manejo de la basura debe regularizarse. “No a cualquier costo”, advierten algunos opositores.

El proyecto de reconocimiento facial atravesó por diversos estadíos. Apenas lo presentó el Ejecutivo, en simultáneo al sistema de fotomultas, surgieron críticas de la oposición, que se agudizaron cuando el juez porteño Roberto Gallardo suspendió el uso del sistema en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Sin embargo, en las últimas semanas, el Frente de Todos reclamó que la contratación del servicio se haga a través de una licitación pública y que se garantice que los datos que no tengan relevancia sean descartados. “Es un planteo que no sólo hicimos nosotros, el propio secretario de Legal y Técnica (Mauro Martinelli) habla de la importancia de que haya un organismo de control interno”, explican en el FdT.

En el oficialismo no pusieron reparos a la idea de licitar. Hubo alguna crítica solapada (“Ellos propusieron la emergencia en seguridad porque se suponía que era una herramienta para que el intendente pudiera gestionar más rápido y cuando la queremos usar se oponen”, lanzó la semana pasada un dirigente cercano a Montenegro), pero confirmaron la voluntad de ir hacia ese proceso.

Martín Ferlauto acudirá al Concejo a defender el reconocimiento facial.

 

Eso hizo esperanzar al oficialismo con la posibilidad de una pronta aprobación. Sin embargo, la oposición reclamó la presencia del secretario de Seguridad, Martín Ferlauto. “Está bien que venga a dar las explicaciones, pero esperemos que no usen esta citación para abordar otras cuestiones”, advierten desde la UCR. No especifican, pero saben que la oposición no dejará pasar la oportunidad de acorralar a Ferlauto con la polémica fiesta, aunque no sea el motivo de la convocatoria.

El futuro del proyecto de reconocimiento facial es incierto. Acción Marplatense no sólo tiene reparos sobre la forma: un proyecto de tres artículos, sin ningún tipo de detalles de los montos, cantidad de equipos, entre otras cuestiones. También le hace ruido el fondo: “Se van a comparar fotos de millones de personas con una base de datos que no sabemos quién maneja, quién la actualiza. Tenemos muchas dudas”, dicen.

El Frente de Todos aún no tiene una postura resuelta. Esperan las garantías de la comisión que garantice la transparencia del funcionamiento del sistema y que el Ejecutivo eleve el pliego licitatorio para conocer los detalles.

“¿Si hay un nueva etapa en el Concejo? Hay mejor diálogo, pero una nueva etapa es mucho. Ya veremos cómo sigue”, analizó una concejal.