En 2019 creció el número de homicidios en Mar del Plata: hubo 48 asesinatos

En 2018 la estadística había marcado 44 crímenes. Una decena aún están sin esclarecer. Dos de los siete homicidios de mujeres fueron calificados como femicidio.

31 de Diciembre de 2019 08:10

Por Redacción 0223

PARA 0223

El crecimiento de asesinatos registrado en los últimos cuatro meses en la ciudad hizo que por segundo año consecutivo crezca el número de homicidios en Mar del Plata. De los 44 registrados en 2018, se pasó a 48 de acuerdo a la estadística confeccionada por 0223 a partir de los datos del Ministerio Público Fiscal.

Del récord de 89 homicidios dolosos registrado en 2013 la estadística marcó un paulatino descenso en los años siguientes: 77 en 2014, 73 en 2015, 41 en 2015 y 35 en 2017. Recién el año pasado se cortó la tendencia descendente con un total de 44 en doce meses.

Septiembre y octubre, con 7 homicidios, fueron los meses en los que se registró el mayor número de homicidios, mientras que julio, con el crimen de José María Hilardi en la puerta de un salón de fiestas en Rondeau casi Solís fue el mes con menor cantidad de hechos. El único acusado por ese crimen fue eximido de prisión a mediados de agosto, aunque sigue imputado.

El dato que no aparece en esta estadística y preocupa a buena parte de los fiscales tiene que ver con el incremento de ataques que terminan en causas por homicidio en grado de tentativa o en lesiones graves que no se terminan registrando. “Esos hechos vienen creciendo sin pausa cada año y solamente de casualidad no generan que el número de homicidios en la ciudad”, dijo un operador judicial.

Consultado sobre este punto el fiscal Alejandro Pelegrinelli sostuvo que ese tipo de ataques por conflictos interpersonales es una tendencia que también estuvo en alza durante 2019. “Si bien puede haber períodos más bajos, por los niveles de violencia que se ven en la calle ese tipo de resolución de conflictos se hizo constante en cada vez más puntos de la ciudad”, señaló.

Al titular de la Unidad Fiscal de Instrucción 5 le tocó intervenir este año en ocho hechos, de los cuales siete estarían esclarecidos completamente y en distinta etapa de resolución: desde cumplimiento de prisión preventiva a elevados a juicio.

Seis de los homicidios estuvieron relacionados con algún tipo de conflicto interpersonal, uno fue en defensa propia por parte de una persona que resistió el ingreso de un delincuente a su casa y el restante fue el homicidio en ocasión de robo que tuvo a Tomás Carlos Marcos como víctima: hace diez días la Justicia de Garantías confirmó la elevación a juicio de la causa que tiene como principal imputado a Nicolás Pérez, aunque la medida fue apelada.

 

“Muchas causas por tentativa de homicidio no avanzan por decisión de las víctimas”

El fiscal Leandro Arévalo coincide en la preocupación sobre la cantidad de lesionados por ataque que se registra en cada turno que le toca cubrir. “Hay semanas en las que tenemos muchísimos lesionados en ataques y no se registran más muertos por una cuestión de puntería”, le dijo a 0223.

“Muchos de esos ataques son notificados cuando los heridos ingresan a la guardia del Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) o a una sala municipal y cuando la policía realiza las primeras actuaciones , declinan de iniciar acción penal alguna”, señaló. Para el titular de la Unidad Fiscal 7 “muchas de esas víctimas después terminan como imputados en otro hecho similar”.

Desde el crimen registrado el primer día del año –Rubén Ferreyra fue asesinado por su hijo en su casa- el fiscal estuvo a cargo de diez investigaciones por homicidio. Con dispares resultados en las causas, le tocó investigar tres de los hechos más conmocionantes de 2019: el asesinato de Karina Fragoso, el de la portera Mirta Graciela Zabalegui en el departamento de Bolívar y Corrientes y el del comerciante peruano Gerard Borja Pastrana en 9 de Julio casi Mitre.

Más allá de las idas y vueltas judiciales –detenciones, liberaciones y pedidos de prisión preventiva- el hecho que más lejos está de poder ser esclarecido fue el crimen de Fernando Danunzio a mediados de marzo en su casa del barrio Pompeya. Otros dos crímenes sin detenidos, pero con pistas firmes para su esclarecimiento fueron los de Kevin Luján en el barrio Belgrano y el de Leonel “Mapuch” Velázquez el pasado 22 de diciembre.

Para Arévalo las únicas investigaciones por tentativa de homicidio que logran tener testimoniales como para avanzan son las relacionadas con cuestiones de género. “En el resto de caso es más difícil tener algunos testimonios: llegué a tener un hombre que fue apuñalado dos veces por su hijo y declaró que se había caído dos veces arriba de un cuchillo”, graficó.

 

Cuatro causas protagonizadas por menores

De las 48 instrucciones penales preparatorias por homicidio abiertas este año, solamente 4 se tramitan en el Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil por haber menores imputados: dos quedaron a cargo del fiscal Carlos Russo y las restantes investigaciones son encabezadas por Walter Martínez Soto y Marcelo Yanez Urrutia.

El primer hecho en el que se registró la participación de un menor fue el crimen de Miguel Quintana en su casa del barrio Cerrito y San Salvador. Minutos más tarde del hallazgo del cuerpo, una adolescente de 17 años fue aprehendida en el barrio Fortunato de la Plaza y aún permanece alojada en el Instituto Cerrado de Menores de Merlo, el único en condiciones de alojar a mujeres menores de edad.

En el crimen de María Lago, la mujer atacada a golpes que murió tras cuatro días de agonía, la situación es diferente porque el principal sospechoso es un menor de 15 años, inimputable para la Ley. El expediente original por robo agravado y lesiones graves fue recaratulado como homicidio en ocasión de robo.

Otro menor de la misma edad fue detenido a fines de septiembre tras confirmarse la muerte de Horacio Mariano Alderete en el Higa a donde había sido trasladado tras recibir una puñalada en inmediaciones de Parque Camet. Si bien el fiscal Martínez Soto halló elementos para confirmar la responsabilidad del adolescente – con severos problemas de adicción que habían sido alertados por su abuela en reiteradas oportunidades a través de distintos pedidos de ayuda a instituciones que no le dieron ninguna respuesta- también es un menor no punible.

El cuarto y último homicidio cometido por menores de edad se dio a mediados de octubre cuando Lucas Miracco recibió un disparo en la esquina de Génova y Cerrito cuando viajaba como acompañante en un Toyota Corolla. Por el hecho el fiscal Marcelo Yanez Urrutia ordenó la detención de dos mayores de edad y tres menores de 15, 16 y 17 años.

El fiscal explicó que con excepción del menor no punible que estuvo detenido diez días y luego quedó a disposición de los organismos del Poder Ejecutivo, los otros cuatro imputados siguen detenidos. “Los dos mayores y los dos adolescentes están con prisión preventiva confirmada –la de los mayores fue apelada- en una causa caratulada como homicidio agravado”, le dijo a este medio.

 

Víctimas de violencia de género

Si bien 7 de las 48 víctimas de homicidios dolosos son mujeres, apenas dos causas son las que durante la investigación penal preparatoria fueron calificadas como femicidio: el crimen de la policía Gisel Varela en inmediaciones de la vieja terminal a comienzos de enero y el de Ana Laura Díaz en un descampado en inmediaciones de las calles Génova y Fitte. En ambos hechos se encuentran detenidas las parejas de las víctimas.

El crimen de Susana Yaz, más allá de la aprehensión de una mujer que tenía el celular de la víctima, no tiene aún imputados aunque hay varias líneas investigativas que aún no fueron descartadas por la fiscalía.

A los ya mencionados homicidios de Karina Fragoso, Mirta Zabalegui y María Lago, hay que sumar el de Alejandra Noemí Almada que tiene alguna característica singular. La mujer de 45 años falleció arrollada por una camioneta cuando Nicolás Echeverría robó una camioneta Kia perteneciente a la empresa Arcor y en la huida la atropelló en Gutenberg y Gianelli. La calificación provisoria de la causa es homicidio simple aunque la defensa insiste que es un homicidio culposo.  

Un dato particular se dio en la semana del 20 al 27 de octubre durante el turno de la Unidad Fiscal de Instrucción 4 a cargo de Andrea Gómez en el que se registraron dos de los seis homicidios que investigó este año y ambos fueron cometidos por mujeres. Por el crimen de Alejandro César su pareja, Margarita Villarruel, fue liberada después de prestar declaración tras confirmarse que apuñaló al hombre para defenderse de ataque al que era sometida en el patio de la vivienda que compartía con sus hijos.